Jueves 11 de junio de 2009, p. 37
La Habana, 10 de junio. Cuba reducirá por la crisis el ritmo de las inversiones que están cambiando la estructura de su industria eléctrica, mientras baja la generación por falta de combustible, informó este miércoles el viceministro de la Industria Básica, Juan Manuel Presa.
Es posible que algunas acciones no las podamos realizar con la misma intensidad con que las veníamos ejecutando
, dijo el funcionario a la prensa. El ritmo no necesariamente es el mismo que llevamos en los años 2006, 2007 y 2008
.
Pero Presa confirmó que se mantiene la meta de que en 2011 el 56 por ciento de la generación salga de baterías móviles de fuel oil, desplazando así a las termoeléctricas, que ahora producen el 61 por ciento.
No escapamos nosotros, ni nadie
a la crisis, agregó. Lo que hay que atemperar es el proceso, pero es un programa que continúa, porque es estratégico
.
Presa subrayó que el plan está tan avanzado como que ya concluyó el despliegue de baterías móviles a diesel, las de fuel están a la mitad y la rehabilitación de redes anda en cerca de 70 por ciento, entre otras acciones que están cambiando el mapa eléctrico de la isla.
Pero el proyecto lanzado en 2005, en el mejor momento financiero de Cuba en décadas, ahora se enfrenta a una aguda escasez de divisas, que ha llevado al gobierno al extremo de restarle combustible a la generación eléctrica para venderlo.
El siguiente paso fue una campaña oficial para reducir la generación mediante el ahorro. De esa forma ha caído el consumo de energía en al menos 10 por ciento, dijo Presa, y advirtió que todavía hay reservas que pueden ser agotadas
para gastar menos.