El presidente de la Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía del Senado, Carlos Sotelo, denunció que la Secretaría de Gobernación (SG) mantiene secuestradas unas 130 solicitudes para operar frecuencias de medios electrónicos, entre ellas, la del Canal del Congreso, que demanda una señal abierta en el valle de México, así como las de pueblos indígenas, universidades y gobiernos estatales.

El senador perredista aseguró que a pesar de que los solicitantes han aprobado todos los requisitos y cuentan con la opinión favorable de la Comisión Federal de Competencia (Cofeco), en la dependencia que encabeza Fernando Gómez Mont se niegan a liberar los expedientes.

Estamos ante un resabio del viejo régimen, que acudía a una acción jurídica del partido de Estado para el control de los medios de comunicación, agregó.

Destacó que el modelo de comunicación en México no se mueve ni un milímetro, situación que urge modificar porque el 95 por ciento de las frecuencias de televisión están en manos de dos empresas. Es un oligopolio de televisión defendido por el gobierno federal.

Se requiere, insistió, que se liberen los permisos que han solicitado diversas comunidades indígenas, ya que hay espectro disponible, pero es necesaria la voluntad política del gobierno, a fin de licitar nuevas concesiones de carácter privado y comercial.

Es absolutamente relevante, insistió, que el Canal del Congreso cuente con una señal abierta, a fin de que los mexicanos puedan seguir por televisión los debates legislativos y la aprobación de leyes.

Insistió en que las solicitudes para operar frecuencias de radio y televisión han pasado por trámites técnicos, administrativos, económicos ante la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) y la Secretaría de Comunicaciones, las que han turnado los expedientes a la Cofeco, y ésta a su vez las remitió a Gobernación, donde invariablemente se quedan congelados las gestiones.

El senador precisó que en Xicoténcatl hay un proyecto de dictamen para eliminar la opinión de Gobernación sobre dichos trámites, y que el proceso sea sólo en el ámbito de las telecomunicaciones, es decir, del órgano regulador, la Cofetel, pero las bancadas del PAN y el PRI se han negado a discutirlo.

Uno de los grandes pendientes de la actual legislatura, dijo, es una reforma integral en materia de radiodifusión y telecomunicaciones, a fin de otorgar a nuestro país un modelo democrático que permita el acceso de los que no han tenido voz en los medios electrónicos, y que posibilite que los los pueblos indígenas, universidades públicas o el mismo canal de televisión del Poder Legislativo, accedan a condiciones equitativas y de competencia en los medios de comunicación electrónicos.