En 5 meses cerraron 10 mil 694 empresas por la crisis; 71 por día, reporta el Inegi
Será necesaria una reforma fiscal que eleve los ingresos para evitar el colapso de las finanzas públicas, advierten grupos financieros
Lunes 18 de mayo de 2009, p. 28
Los principales grupos financieros del país estiman una severa caída de la economía mexicana en el primer trimestre del año, con un retroceso hasta de 8 por ciento en el producto interno bruto (PIB), como resultado del impacto de la crisis financiera global. Adicionalmente, advierten que el gobierno y el Congreso tendrán que acordar una reforma fiscal capaz de incrementar el nivel de ingresos fiscales, que actualmente equivalen a sólo 8.1 por ciento del PIB, para evitar un colapso en las finanzas públicas.
La división de Estudios Económicos y Sociopolíticos del Grupo Financiero Banamex señala que es probable que el PIB se contraiga a un ritmo no visto desde hace más de una década. En un reporte que empezará a difundirse entre sus inversionistas a partir de este lunes, la subsidiaria en México del global Citigroup asegura: El consenso espera una contracción del PIB de 8 por ciento, casi en línea con nuestra previsión
de menos 7.7 por ciento.
Los analistas Eduardo González, Arturo Vieyra y Sergio Luna explicaron que la severa caída en el PIB está asociada con un rápido deterioro de la industria y los servicios, mientras para el sector agropecuario o primario se espera un magro avance anual.
El grupo financiero Santander coincide en una baja en el PIB de 7.7 por ciento anual en el periodo enero-marzo de este año, con retrocesos de 10.5 por ciento anual en la producción industrial, así como de 5.9 por ciento en servicios. A su vez, el sector agropecuario habría presentado un avance de 2 por ciento en términos anualizados.
Por su parte, el Grupo Financiero Bancomer-BBVA recordó que el deterioro en la actividad económica se acentuó a partir de diciembre pasado, con lo que la dinámica de la actividad será considerablemente peor a lo esperado a inicios del año pasado
. Los especialistas Octavio Gutiérrez y Cecilia Posadas estiman un descenso en el PIB de 7.4 por ciento.
Con una percepción más optimista los grupos financieros Ixe e Invex prevén caídas en el PIB de 7 y 5.7 por ciento, respectivamente. Los analistas de Invex estiman que en el periodo abril junio se observará una caída todavía mayor por el efecto estacional de la Semana Santa como por la fuerte afectación que sufrieron el comercio y los servicios ante la contingencia sanitaria. El turismo podría ser el sector más afectado.
Desde que se aprobó el presupuesto 2009, en noviembre de 2008, hasta ahora, el cambio en el escenario económico oficial ha sido ajustado drásticamente a la baja. Principalmente la perspectiva inicial de un crecimiento del PIB de 1.8 por ciento cambió hasta un pronóstico actual de menos 4.1 por ciento, y el precio del petróleo se modificó desde 70 dólares por barril hasta 42 dólares.
Este cambio de escenarios tiene un impacto mayor en la perspectiva de ingresos públicos para este año, que en las estimaciones oficiales implica una pérdida de ingresos petroleros y tributarios no petroleros por 235 mil millones de pesos, equivalentes a 1.9 por ciento del PIB, a los que se suma una pérdida de 10 mil millones por efecto de la actual crisis sanitaria.
Sin embargo, los cálculos de Banamex indican que los ingresos petroleros serán menores en 117 mil millones y los tributarios no petroleros en 99 mil millones de pesos, a lo que se suman mayores erogaciones que el gobierno se comprometió a hacer para contrarrestar los efectos de la contingencia sanitaria.
Menos recursos y más gastos
Los menores recursos y mayores erogaciones que impulsan un mayor déficit para este año suman 224 mil millones de pesos, los cuales serán casi totalmente compensados por las coberturas petroleras, la mayor devaluación del peso, el remanente de operación del Banco de México y un menor gasto no programable y otras fuentes de ingreso
.
Al respecto, el grupo financiero Scotiabank alertó: Hacia adelante se vislumbran nubarrones en el clima económico para las finanzas públicas, de manera que el gobierno y el Congreso tendrán que acordar una reforma fiscal capaz de incrementar sustancialmente el nivel de los ingresos fiscales, actualmente de tan sólo 8.1 por ciento del PIB
.
El especialista Francisco J. Gutiérrez, advierte que de no hacerse una reforma fiscal la deuda del gobierno crecerá más rápido y el gasto se tendría que recortar, y ninguna de estas dos opciones sería buena. En el primer caso porque la calidad de la deuda gubernamental (ingresos/obligaciones) se deteriorará, y en el segundo porque muchas de las necesidades sociales básicas (salud, educación e infraestructura) pudieran quedar desatendidas. Así que la opción es corregir la falta de competitividad en el sistema fiscal, incrementando la recaudación tributaria
.
El gobierno, dijo, puede verse obligado a incrementar impuestos o precios importantes (como el IVA, la gasolina y la electricidad), lo que tendría repercusiones en otros precios y produciría una reacción en cadena y una burbuja inflacionaria que necesitaría ser contenida, refirió.
La industria de la transformación resultó la más afectada
Erika Duarte
Un total de 10 mil 694 empresas cerraron en cinco meses –de octubre a febrero–, desde que comenzaron a resentirse los efectos de la crisis. Según los datos más recientes publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en promedio 71 empresas suspendieron actividades cada día, y la industria de la transformación es la más afectada, con mil 794 cierres en ese lapso.
Desde el 31 de octubre al 28 de febrero y por cinco meses consecutivos las empresas instaladas en el país detuvieron su marcha, lo que se expresó en un aumento de las pérdidas de empleos formales, pues por cada empresa que cierra, 73.7 personas pierden sus puestos de trabajo.
Al cierre de octubre de 2008 se encontraban registrados 837 mil 563 patrones ante el Instituto Mexicano del Seguro Social y para el cierre de febrero de este año la cifra se redujo a 826 mil 869, es decir, 10 mil 694 empresarios no lograron solventar los efectos de la crisis.
Miguel Marón Manzur, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, afirmó que mientras no se ofrezca un apoyo decidido al mercado interno, la industria nacional –que aporta la cuarta parte del producto interno bruto– seguirá cayendo de manera importante, lo que provocará un mayor desempleo.
En entrevista recordó que en los últimos años el sector había sido el de menor crecimiento en el país, por añadidura, desde la crisis que se resintió a partir de los últimos tres meses de 2008 es el que mayor decrecimiento ha tenido y donde se dio la mayor cantidad de empleos perdidos.
Peores perspectivas
Marón Manzur señaló que las perspectivas para el resto del año empeoran, puesto que prácticamente la mitad de las empresas afiliadas a la cámara ocupan únicamente entre 30 y 60 por ciento de su capacidad de producción.
El Inegi dio a conocer que la industria nacional registró una caída anual de 13.2 por ciento en febrero pasado, el peor nivel desde la crisis de 1995, mientras la pérdida de empleos fue de casi 400 mil plazas entre febrero de 2008 y el mismo mes de este año, según datos del Seguro Social.
Los datos oficiales dados a conocer a esa fecha revelan que la mayor pérdida de empleos se presentó en el Distrito Federal, donde 82 mil 535 trabajadores fueron despedidos en esos cinco meses; le sigue Nuevo León, con más de 65 mil casos; Chihuahua con casi 58 mil; Baja California con 56 mil 529; estado de México con más de 50 mil plazas canceladas.