La película X-Men Origins: Wolverine encabeza una cascada de estrenos de ciencia ficción
Desatan algarabía en la industria cinematográfica para evitar mayor hundimiento financiero
Star Trek, Angels & Demons y Terminator: Salvation, entre la lista de cintas debutantes
Domingo 3 de mayo de 2009, p. 6
Los Ángeles, 2 de mayo. Son tiempos duros y están empeorando, de modo que Hollywood se refugia en el escapismo y las historias fantásticas, intentando animar a un público golpeado por la recesión con una temporada de verano en el cine que comenzó con el estreno de X-Men Origins: Wolverine.
Después de Wolverine vendrá el estreno de la nueva versión de alto presupuesto de Star Trek, la conspiración de Angels & Demons y el largometraje de acción Terminator: Salvation.
Y las estrellas del verano son también de primer nivel: desde Tom Hanks y Will Ferrell hasta Jennifer Aniston.
¿Por qué existe tanta algarabía en torno al verano de Hollywood? Aquellos cuatro meses en Estados Unidos y Canadá pueden suponer hasta 40 por ciento de las ventas de entradas anuales, así que si la temporada se estanca desde el principio, Hollywood se hundiría aún más en su propia crisis financiera.
Pero una estrella sostiene que no siente ninguna presión por aparecer en su primer filme de agarre: Hugh Wolverine Jackman.
Cualquiera que sea la fecha (de estreno), querré hacerlo bien
, declaró Jackman sobre su nueva película de la saga X-Men. “Probablemente haya más crédito para la gente –más allá de si lo pasan bien o no– por el hecho de que importa mucho para la taquilla”, señaló.
A pesar de que una versión sin terminar de la película se filtró en Internet antes del estreno, se espera que Wolverine –en la que Jackman interpreta a un mutante que acaba con los malos con sus garras retráctiles– dé un impulso a la taquilla en un año que ya es próspero, gracias a los espectadores que intentan escapar de la vida cotidiana.
Motivos de dinero
Hasta ahora, la taquilla estadunidense ha recaudado 3 mil 60 millones de dólares, lo que supone 17.4 por ciento más que el año pasado, según la empresa de seguimiento de taquilla Media by Numbers.
Wolverine, por supuesto, no es la única oferta. Su estreno, el viernes, competirá con la cinta romántica Ghosts of Girlfriends Past, en la que Matthew McConaughen encarna a un a un mujeriego que recibe la visita de fantasmas que le ayudan a recuperar su amor de juventud.
Los aficionados a las películas más antiguas que quieran una aventura espacial sólo tienen que esperar hasta el 8 de mayo para ver Star Trek, nueva versión del director JJ Abrams de las primeras aventuras de la tripulación del USS Enterprise, incluidos el capitán James T Kirk, Spock, Sulu y Chekov.
El 22 de mayo, en Night at the Museum: Battle of the Smithsonian un museo cobra vida y una semana más tarde un anciano hace volar a su casa con miles de globos en Up, la última película de Disney/Pixar.
Sin embargo, no hace falta dejar la Tierra para encontrar fantasía o amenazas futuristas.
El 15 de mayo llegará a los cines Angels & Demons. La versión en pantalla grande de la novela de Dan Brown que antecede a The Da Vinci Code llevará de nuevo al cine al experto de Harvard en simbología Robert Langdon (Tom Hanks) y sus intentos por descubrir los secretos del Vaticano.
Por su parte, Christian Bale deja el traje de murciélago por un mundo post apocalíptico en Terminator: Salvation, que estará en cartelera el 21 de mayo. Habrá más robots malvados en Transformers: Revenge of the Fallen, que se estrenará el 26 de mayo.
Y aun así, el verano no estaría completo sin comedias. Will Ferrel protagoniza Land of the Lost, basada en una serie de los años 70 en la que gente del mundo moderno huye de dinosaurios. Se estrena el 5 de junio.
El lado terrorífico lo pondrá Sam Raimi, que vuelve a sus raíces con Drag me to Hell, donde Alison Lohman encarna a una empleada de banco que sufre una maldición. Le seguirán, en junio, los zombis nazis de la cinta noruega Dead Snow.
Más realista es Public Enemies, una historia verdadera sobre ladrones de bancos de los años 30 que cuenta con Johnny Depp, Christian Bale y Channing Tatum.
No ofrece mucho escapismo, pero puede dar algo de consuelo a un público cansado de rescates financieros.
Todo esto, sólo para preparar al público para la segunda mitad del verano, cuando llegue la esperada Harry Potter y and The Half Blood Prince.