Miércoles 29 de abril de 2009, p. 3
La prioridad para el gobierno federal en la actual contingencia es la salud pública, para lo cual se actúa en estricto apego a lo que determine la Secretaría de Salud. Al mismo tiempo es prioritario garantizar la continuidad de la economía nacional, afirmó el secretario del Trabajo, Javier Lozano.
Así, implícitamente, el funcionario negó el respaldo al Gobierno del Distrito Federal en su decisión de ordenar el cierre de restaurantes a partir de ayer.
Lozano puntualizó que en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud –al declarar la fase 4– no encontramos restricciones a las actividades económicas
, ni que exista la necesidad de cerrar establecimientos mercantiles.
Si el gobierno de la República viera que una medida de este tipo contribuye a mitigar los efectos de la epidemia, si fuera positivo o necesario, la Ssa lo dictaría en uso de sus facultades plenas
y se acataría, dijo.
Lozano reconoció que la decisión de la administración de Marcelo Ebrard del cierre de restaurantes, se da con apego a la Ley de Establecimientos Mercantiles y el Estatuto de Gobierno. No obstante, insistió en que las medidas sanitarias puestas en marcha a partir del viernes, como la suspensión de actividades escolares y la cancelación de eventos masivos, tienen el objetivo de evitar las fuentes de contacto en los espacios cerrados o abiertos, pero siempre donde haya aglomeraciones
.
Sólo unos minutos después de la reunión que tuvieron los secretarios del Trabajo y de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, con el sector empresarial, y en la que éste expresó su desacuerdo con el cierre de comercios en la capital, Lozano planteó que la emergencia sanitaria “no significa que no debamos mantener la vida civil –económica, social y familiar. Debe haber tanta libertad como sea posible y también tanta restricción como sea necesaria”.
Por otra parte, respecto del apoyo que seguramente requerirán los pequeños y medianos empresarios por la afectación en sus actividades económicas, el secretario Lozano dijo que todavía es temprano para conocer la magnitud de la repercusión y también para determinar medidas de respaldo.