Nueva York, 21 de abril. El Festival de Cine de Tribeca en Nueva York, impulsado, entre otros, por Robert de Niro, abrirá mañana sus puertas en un momento de crisis económica que ha hecho reducir la programación de esa reunión fílmica.

Es cierto que esta vez hay menos películas, dijo hoy en rueda de prensa Jane Rosenthal, coorganizadora del festival, quien añadió que a pesar de la crisis económica, “tanto en los malos como en los buenos tiempos a la gente le encanta ir al cine.

El festival nació con el objetivo de dar esperanza e inspiración, y en este momento lo necesitamos, señaló Rosenthal, quien recordó que el festival de Tribeca surgió precisamente para revitalizar un barrio afectado gravemente por los atentados del 11 de septiembre.

Por su lado, Robert de Niro sólo tuvo palabras de satisfacción: Como actor, realizador, neoyorquino y aficionado al cine me congratulo mucho de estar involucrado en este festival.

A pesar del ajuste provocado por la crisis, la nueva edición de esta cita cinematográfica contará con el atractivo de grandes estrellas como Woody Allen, quien inaugurará el encuentro con su nuevo filme, la comedia Whatever Works, en la que el cineasta vuelve a rodar sus queridas calles de Manhatan, algo que no hacía desde 2004.

El festival también contará con la presencia de Spike Lee, quien estrenará la cinta dedicada al jugador de la NBA Kobe Bryant, Kobe Doin’ Work. Además se podrá ver la película que hizo basada en el musical de Broadway, Passing Strange, y tras la cual habrá un coloquio con el realizador y los creadores del musical, Stew y Heidi Rodewald.

Importante escaparate

Por su parte, Spike Lee, quien participa por primera vez en Tribeca, destacó la importancia de los festivales por el hecho de ser el escaparate en el que se puede mostrar tu obra.

Durante el festival, que concluirá el 3 de mayo, se podrán ver 85 películas –entre ficción y documentales– y 46 cortometrajes. La mitad de las producciones, procedentes de 36 países. serán estrenos mundiales.