No garantizan seguridad para usuarios: dueños de establecimientos
Lunes 20 de abril de 2009, p. 44
En un ambiente tenso, con fuertes diferencias que se han trasladado ya al ámbito legal, este lunes reinician negociaciones las autoridades del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y del Consejo Ciudano de Seguridad Pública del Distrito Federal, con los representantes de las casas y centros cambiarios de la terminal aérea, para poner en marcha la disposición de colocar mamparas en dichos sitios, como medida de seguridad recomendada por los gobiernos federal y local.
Hasta ahora, ninguna de las partes ha cedido en sus posturas: las autoridades insisten en que no darán marcha atrás en la colocación de las mamparas metálicas para garantizar la privacidad y seguridad de quienes acuden a los centros cambiarios a realizar operaciones comerciales, mientras que los representantes de éstas señalan el alto costo y la inconveniencia de colocarlas, así como la inutilidad en el terreno de la seguridad para el usuario.
La recomendación de las mamparas se dio desde la formulación del programa Protejamos Nuestro Aeropuerto, que se inició el pasado 2 de marzo, luego de que el cientítico francés Christopher Augur, quien había cambiado divisas en el AICM, fue asaltado y asesinado en las inmediaciones de la terminal aérea, y después de una larga lista de denuncias presentadas por usuarios de los centros cambiarios.
Junto con las mamparas, se recomendó también el retiro de teléfonos celulares al personal de todas las casas de cambio en horas de trabajo, sugerencia que ha sido aceptada y puesta en operación, según se observó en un recorrido que hace dos semanas hicieron por la terminal aérea su director general, Héctor Velázquez Corona, y el titular del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública del DF, Meyer Klip Gervitz, quien lamentó desde ese momento la falta de sensibilidad
de un grupo de dueños de las casas de cambio, pues el único fin de las mamparas es dar privacidad al usuario para realizar la operación de compra-venta de divisas.
Las negociaciones se han tornado ríspidas, pues las autoridades han advertido que no darán marcha atrás en la intención de cumplir con todas las recomendaciones que garanticen la seguridad de los usuarios de la terminal aérea.
En las evaluaciones semanales del programa entre el Consejo Ciudadano y las autoridades locales y federales se ha insistido en que la estructura actual de seguridad en las casas y centros cambiarios es vulnerable
; se han revisado imágenes de la falta de privacidad que permite a personas ajenas observar con detalle los montos de las transacciones.