Puebla, Pue., 17 de abril. Pocas oportunidades se presentan en tierras poblanas, como la virtuosa y soberbia ejecución del Quinteto Suárez Paz, que interpretó la noche del jueves el sui generis programa Las ocho estaciones, creado ex profeso para inaugurar la primera edición del Festival Barroquísimo, a propósito del 478 aniversario de la fundación de Puebla.

La excelsa sonoridad desbordada de las cuerdas del quinteto argentino estremeció a los más de cinco mil asistentes que colmaron el zócalo de la capital poblana. Antes, estuvieron la Banda Real de Ichán y la Camerata Bariloche, que prepararon el escenario y al público, que literalmente voló de Las cuatro estaciones, de Vivaldi, a Las cuatro estaciones porteñas, de Astor Piazzola.

Minutos antes, el maestro Fernando Suárez Paz (Ramos Mejía, 1941), considerado el violinista mayor de Argentina, concedió una entrevista a La Jornada, acompañado de los integrantes del quinteto, agrupación que emula su formación piazzollana y escuela tanguista, de finales de la década de los 70.

Para interpretar a Piazzolla...

El Negro, como lo llaman en su país, asegura que existen muy buenos músicos clásicos que quieren interpretar a Piazzolla; pero para llegar a él “primero tienen que aprender a tocar tango. Actualmente, las nuevas generaciones no han corrido con la suerte que nosotros tuvimos, de trabajar 11 años con él. Además, Argentina, en lugar de ir para arriba en el apoyo a la música, va para abajo; es lamentable.

“Es triste saber que en el país donde surgió el tango sólo exista una orquesta-escuela. En otras naciones se enseña más que en Argentina el género del tango.

Existe la Orquesta del Tango, que siempre hace lo mismo. No hay cambio de directores, y eso también es política que atenta contra la cultura y a su vez contra los músicos.

Recién desempacado de Japón, con vida de gitano, pues vamos de un lugar a otro, el ex integrante del Quinteto Tango Nuevo consideró que el futuro del tango es incierto. Ha estado flotando, no es rebosante, pero tampoco se hunde, ni se hundirá jamás; aunque, repito, a la gente del gobierno, a los políticos, les interesa apoyar la música fácil, el rock, la música extranjera. No se preocupan por la nacional, pese a que los argentinos garantizamos el legítimo perfume tanguero.

–En ese sentido, ¿cómo vislumbra el futuro del tango?

–Veo bien al tango en el extranjero, no en Argentina. Y eso es cierto, ¿o no?

En mi país sólo hay un concierto de tango al año, y es para turistas. Por eso los tangueros tenemos que salir, porque es en el extranjero donde se nos reconoce. En el caso del baile que hacían nuestros abuelos, ya desapareció. Ahora sólo es de circo, no tiene nada que ver con lo autóctono. Es triste, pero cierto.

Rememora que siendo muy joven, a los 18 años de edad, tocó por primera vez el violín en la orquesta de Astor Piazzolla. Luego integró el famoso quinteto con el que recorrió los teatros del país y el mundo entero, hasta su disolución, en 1988. Compartió escenario con figuras como Aníbal Troilo y Horacio Salgán.

En la década de los años 80 visitó Puebla con Piazzola, donde ofrecieron un concierto en las escalinatas del Palacio de Justicia.

–¿Cómo recuerda a Astor Piazzola?

–Como el gran músico que siempre buscó cosas buenas, que siempre intentó hacer algo diferente; en la experimentación, con quintetos, sextetos, octetos; con orquestas sinfónicas o solo; escribió prolíficamente, y hay muchísima de su obra que no se conoce, aunque la mejor formación que tuvo fue la de quinteto.

Cuando se le pregunta sobre el compromiso que le representa el título de violinista mayor de Argentina, llano y sencillo responde entre risas: no lo veo así. Tal vez lo dicen por mi edad, pero eso no lo puedo admitir.

Como parte del primer día de actividades, autoridades estatales y locales, encabezadas por el gobernador del estado, Mario Marín Torres, y la presidenta municipal, Blanca Alcalá, inauguraron la exposición Barroquísimo, de la fotógrafa alemana Candida Höfer, con una veintena de obras que albergará hasta el 5 de mayo la galería del Palacio Municipal.

Programa del fin de semana

Para este fin de semana el programa musical está integrado por Ethel, Mono Blanco, Bandula, Alonso Arreola, Mariachi Clown y la Sensacional Orquesta Lavadero; en teatro se presentará Monólogos de la maquila y De maleficios, magias y otros sueños, de la compañía local Teatro Aira. En gastronomía, Cocinas que se funden: cemitas poblanas y tiraditos limeños. Para obtener mayor información sobre el encuentro puede consultar la página web www.festivalbarroco.org