A partir de la idea de que si el público no va al mural –o va, pero dosificado–, entonces el mural debe ir al público, este jueves se inauguró en la estación Candelaria de la Línea 1 del Metro, en las vitrinas de exposiciones ubicadas en dirección Pantitlán, una muestra en torno a la conocida obra Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, de Diego Rivera.

La exposición cuenta con una copia de ese mural de 5.20 por 1.65 metros, así como información de las decenas de personajes de la Colonia y los siglos XIX y XX que en él aparecen, además de una serie de fotografías de la épica del traslado de esa obra monumental del hotel del Prado –donde Rivera la pintó en 1947– al recinto exclusivo que se le construyó luego de los sismos de 1985.

Entre los objetivos de la muestra se encuentra aumentar el público de dicho Museo Mural Diego Rivera, ubicado en Colón y Balderas, comentó la directora del mismo, Carmen Gaytán, quien aseguró que tras una labor de difusión de cerca de dos años, casi se ha logrado triplicar la asistencia, de alrededor de 25 a 70 personas diarias en promedio, y de 200 a 500 los fines de semana.

Gaytán dijo que en esa labor de búsqueda de nuevos públicos destacan acuerdos como el realizado con el Sistema de Transporte Colectivo (STC), que ha permitido campañas de divulgación en vagones del Metro y la propia muestra inaugurada este jueves, El Museo Mural Diego Rivera viaja en el Metro, que permanecerá abierta el resto de abril.

El Metro, agregó la funcionaria cultural, es un medio inmejorable para la divulgación, pues por sus estaciones transitan más de 4 millones de usuarios al día, mientras que por la de la Candelaria se estima que caminan unos 100 mil diarios, de los que se calcula que unos 10 mil suelen detenerse en las vitrinas de exposiciones.

La muestra El Museo Mural Diego Rivera viaja en el Metro fue inaugurada por Gaytán y Samuel Ayala, gerente de atención al usuario del STC, y luego de la ceremonia varios metronautas comenzaron a merodear por las vitrinas, en la que también destaca la famosa Catrina, acompañada por José Guadalupe Posada, Rivera niño y Frida Kahlo.