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Efectiva desde hoy, la dimisión de Rolando de Lassé Cañas, anunciada hace un mes

En pleno proceso electoral, queda acéfala la dirección jurídica del IFE

Deja el funcionario 79 quejas pendientes; temen desbandada en esa área estratégica del instituto

 
Periódico La Jornada
Miércoles 15 de abril de 2009, p. 14

Presentada con casi un mes de anticipación, la renuncia del director jurídico del Instituto Federal Electoral (IFE), Rolando de Lassé, se hará efectiva hoy, cuando dejará el cargo sin que hasta ayer, el consejero presidente del organismo, Leonardo Valdés, haya consensuado el nombre del sustituto. La posición es estratégica, particularmente en este proceso electoral, que se ha caracterizado por la presentación de gran cantidad de recursos.

La designación de funcionarios del círculo cercano de Valdés Zurita constituye una complicada gestión que ha derivado, en algunos casos, en el rechazo de propuestas, como ocurrió con el secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo Molina, quien fue designado por consenso, pero luego de varios intentos y de colocar encargados de despacho para cada sesión de Consejo General.

La Dirección Jurídica lleva el peso de los procedimientos legales que se interponen ante el IFE y constituye el principal soporte de la secretaría ejecutiva. Desde la llegada de Valdés a la presidencia del Consejo General –en febrero de 2008– son ya tres los miembros de la Junta General Ejecutiva que han dejado el cargo. Antes de De Lassé lo hicieron Ignacio Ruelas, director ejecutivo del Servicio Profesional Electoral, y Fernando Agiss, director ejecutivo de Prerrogativas y Partidos Políticos.

En este último caso, la dimisión se originó por diferencias con Edmundo Jacobo Molina, versión que también corrió cuando De Lassé Cañas presentó su renuncia, el 18 de marzo pasado. En su momento se planteó que las diferencias con Jacobo Molina habían precipitado su salida, aunque el propio De Lassé rechazó dicha versión, señalando que se incorporaba a la Asociación Mexicana de Impartidores de Justicia AC, organización vinculada a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, instancia que habría buscado al funcionario del IFE para convocarlo a integrarse a ella.

Por lo pronto, De Lassé –quien llegó al cargo el 21 de septiembre de 2005, 15 días antes de que arrancara formalmente el proceso electoral de 2006– dejará pendientes cuatro quejas de carácter ordinario que viene arrastrando desde esas elecciones presidenciales, que se mantienen a pesar de los masivos desistimientos que los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) han hecho en dos ocasiones.

Asimismo, dejará seis quejas presentadas desde 2007, 39 más que los partidos interpusieron el año pasado, así como 30 que serán desahogadas vía ordinaria promovidas este año. En total, 79 casos que están en curso, entre los que destaca la interpuesta por el PAN contra los partidos que integraron el primer Frente Amplio Progresista –PRD y los partidos del Trabajo y Convergencia– por la compra de espots para promover una movilización del ex jefe de Gobierno capitalino Andrés Manuel López Obrador contra la reforma petrolera propuesta por el presidente Felipe Calderón.

Pese a que por ahora formalmente sólo se conoce la renuncia de De Lassé, entre algunos consejeros del IFE existe temor de que se produzca una salida masiva del área jurídica del instituto, lo cual complicaría sustancialmente las tareas del organismo, ante lo avanzado del proceso electoral y la necesaria adecuación a los requerimientos del área con la reforma electoral puesta en marcha.

La designación tendrá que aprobarse en sesión de Consejo General, que por ahora se tiene programada para la próxima semana, para realizar algunas resoluciones con respecto a la fiscalización, lo que hace suponer que el cargo quedará vacante unos días más.