Evalúa el gobierno de EU participar en GM, pero sólo en sectores que puedan sobrevivir
La banca comercial retiró $35 mil millones en créditos a clientes y no llegan apoyos oficiales
Miércoles 15 de abril de 2009, p. 29
Los estragos por la crisis económica y la falta de apoyos a la industria automotriz nacional por parte de Nacional Financiera (Nafin) son cada vez mayores, denunciaron las asociaciones Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y Mexicana de Distribuidores de Autos (AMDA) al dar a conocer que durante marzo las ventas cayeron 19.8 por ciento, y el retroceso al cierre del primer trimestre del año suma 25.9 por ciento.
El presidente de la AMIA, Eduardo Solís, advirtió que además de la cautela de los consumidores para adquirir una nueva unidad, la industria padece el fracaso de las incipientes políticas gubernamentales y la falta de créditos de la banca comercial, que en los últimos cinco meses ha dejado de dar financiamiento por 35 mil millones de pesos.
Detalló que la situación en la industria automotriz es cada vez más preocupante debido a que las ventas de autos reportadas por la AMDA al cier re de marzo mostraron una reducción de 19.8 por ciento respecto al mismo mes de 2008, lo que se traduce en la venta de 64 mil 242 vehículos, equivalente a 15 mil 876 unidades menos.
Se vendieron 68 mil 473 vehículos menos en el primer trimestre
Los resultados acumulados entre enero y marzo de 2009 son todavía menos favorables, ya que reflejaron una caída en las ventas de vehículos ligeros de 25.9 por ciento en comparación con el periodo comparable de 2008, lo que se expresa en la venta total de 195 mil 484 unidades, 68 mil 473 menos que durante el primer trimestre del año pasado.
Eduardo Solís dijo que estos resultados son producto de la falta de financiamiento de la banca comercial, que en los últimos cinco meses ha retirado de este mercado alrededor de 35 mil millones de pesos, que se dedicaban a créditos para los clientes de los distribuidores, y que en condiciones económicas más favorables hasta se triplicaban en un año.
Aunado a ello, sostuvo, el programa de apoyo creado a través de Nafin tampoco ha dado los resultados esperados, ya que no son apoyos directos para las agencias y los distribuidores, que han tenido que financiar la compra de unidades con recursos propios, mientras empresas como General Motors, Volkswagen y Chrysler no pueden acceder al programa de paros técnicos promovidos por el gobierno debido a que sus trabajadores perciben más de seis salarios mínimos.
AMDA y AMIA detallaron que durante marzo el mayor impacto se registró en el segmento de vehículos de peso bruto superior a las 3.5 toneladas, donde las ventas cayeron 42.1 por ciento; mientras la venta de subcompactos descendió 20.1 por ciento, de manera que se vendieron 15.4 por ciento menos compactos; así como 10.9 por ciento menos autos de lujo y 17.1 por ciento menos deportivos.
Las marcas más afectadas por la crisis durante el primer trimestre de 2009 fueron Volvo, con una caída en ventas de 48.7 por ciento; Lincoln con 46.3 por ciento menos; BMW con 37.3; General Motors con 36.7; Fiat con 35.7; Chrysler con 33.9; Land Rover con 33.2 y Nissan con 31.4 por ciento menos ventas.
Acreedores de Chrysler preparan contraoferta; el Tesoro les pide renunciar a 7 mil mdd
Reuters, Dpa y Afp
para salvar mil empleosen Niort, al oeste de FranciaFoto Reuters
Nueva York, 14 de abril. El gobierno estadunidense evalúa la participación estatal en la automotriz General Motors (GM), mientras acreedores de Chrysler preparan una contraoferta para el Tesoro que podría incluir acciones y algo de efectivo en una eventual alianza con la italiana Fiat, a cambio de abandonar su reclamo de 7 mil millones de dólares en deudas.
La participación del Estado en GM podría ser a cambio de una parte de los millonarios créditos estatales otorgados a la automotriz, informaron hoy medios locales. De esta forma se reduciría la deuda del fabricante de coches. Sin embargo, la participación estatal sería sólo temporal.
Según los planes, el Estado formará parte de una GM más reducida, que sólo abarcará a los sectores de la empresa que puedan sobrevivir. Esto también reducirá la participación de los acreedores privados en la misma.
Según informes periodísticos previos, a los acreedores se les ofreció recientemente 90 por ciento de GM a cambio de renunciar a cobrar deudas por 28 mil millones de dólares. La secretaría del Tesoro y GM se negaron a comentar los reportes.
Para agravar más la situación la agencia de seguridad vial estadunidense (NHTSA) ordenó retirar cerca de 1.5 millones de vehículos de GM construidos entre 1997 y 2003 debido a que se comprobaron riesgos de incendio, indicó este martes la cadena CNN.
Por su parte, acreedores de Chrysler están analizando una respuesta después de ser informados sobre los principales problemas del plan de restructuración de la automotriz, incluyendo la estructura de capital propuesta para una alianza entre Chrysler y Fiat, según fuentes cercanas al tema.
Esa información fue entregada a los acreedores de Chrysler el domingo, unas dos semanas después de que éstos rechazaran un pedido del gobierno de pasar a pérdidas 6 mil millones de dólares del monto que se les debe, explicaron.
Las fuentes, que declinaron ser identificadas porque las negociaciones son confidenciales, dijeron que la contraoferta podría salir en pocos días.
El comité de dirección de los prestamistas de Chrysler fue ampliado para incluir a cuatro firmas financieras que no recibieron fondos de un rescate estatal: Elliott Management, Oppenheimer Funds, Stairway Capital Management y Perella Weinberg Partners, añadieron.
Elliott Management se sumó la semana pasada, mientras las otras tres compañías se agregaron el fin de semana, dijo una de las fuentes. Los bancos acreedores incluyen a JPMorgan, Goldman Sachs, Morgan Stanley y Citigroup.
Estas entidades recibieron fondos federales del Programa de Alivio de Activos en Problemas, factor que ha sido visto como eventual complicación en sus negociaciones con el grupo de trabajo designado por el presidente Barack Obama para la industria automotriz.
Esos cuatro bancos y Bear Stearns suscribieron un préstamo de 7 mil millones de dólares en el verano boreal de 2007, con el cual Cerberus Capital Management adquirió 80.1 por ciento de Chrysler a Daimler.
Chrysler ha sobrevivido en el último tiempo gracias a un crédito de emergencia de 4 mil millones de dólares de Washington.