La fracción del Partido Acción Nacional (PAN) dio un viraje en su postura y decidió insistir en que desde la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) se regulen las marchas y los plantones en la capital, pese a un acuerdo previo en el cual se reconocía que no se contaba con facultades para legislar en la materia.

Inclusive, hace ocho días los titulares de las comisiones de Participación Ciudadana, Humberto Morgan; Transporte, Tomás Pliego, ambos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Seguridad, Carmen Segura, del PAN, habían determinado explorar una ruta para enviar una iniciativa a la Cámara de Diputados para reformar los artículos seis y nueve constitucionales, con el fin de que se permita a los órganos locales legislar en ese rubro.

Sin embargo, ayer, tras una reunión en privado, la bancada panista decidió no aceptar esa propuesta y mantener su planteamiento original de que el tema se debata en la Asamblea, con base en un dictamen sobre manifestaciones públicas que recoge diversas iniciativas que están en análisis.

Así lo confirmó la panista Carmen Segura, quien justificó que hacerlo de esa manera sería tanto como claudicar y contradecirnos, cuando originalmente presentamos una iniciativa popular.

Al respecto, el perredista Humberto Morgan indicó que si bien no se ha cerrado el diálogo al respecto, todo parece indicar que de nueva cuenta los panistas pretenden utilizar el tema de las marchas y los plantones como golpeteo político

Lamentó que por cuestiones políticas hayan cambiado de actitud, pues ya había un acuerdo para sacar por consenso la iniciativa, en la que también se planteaba la integración de un cuerpo de funcionarios de alto nivel, tanto del gobierno federal como del local, para atender las movilizaciones en la ciudad.

En coincidencia, Tomás Pliego señaló que la intención del PAN es lograr una exposición política y mediática desde la Asamblea para ganar terreno y simpatía de la gente, pues de antemano no cuentan con los argumentos ni con los votos necesarios para sacar adelante su propuesta.

Sin duda, agregó, es un viraje político-electoral. Van a intentar aprovechar la coyuntura de julio para montarse en un tema polémico. Nosotros vamos a mantener la misma postura de hace ocho días. Es el PAN el que faltó a su palabra. Lo lamentamos mucho, aunque no estamos cerrados al diálogo, aseveró.

Por lo pronto, el compromiso de los tres diputados es convocar a comisiones unidas el próximo viernes para aprobar el dictamen y subirlo el pleno el siguiente martes.