En sólo cinco meses se perdieron 289 mil 239 empleos en la frontera norte, que representan casi la mitad de las cerca de 600 mil plazas suprimidas en todo el país desde octubre, cuando comenzaron a recrudecerse los efectos de la crisis financiera internacional, revelan datos del Seguro Social.

Humberto Jaramillo, vicepresidente nacional de delegaciones de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), señaló que los cinco estados de la frontera norte –Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas– han sido los más afectados, porque la mayor parte de la producción fabril de esos centros se destina a Estados Unidos.

Apuntó que menos de la mitad de las empresas que solicitan inscribirse en el programa de paros técnicos logran acceder a los apoyos, y la queja es que no llegan los recursos. En tanto, las autoridades federales proporcionan información encontrada. Por un lado la Secretaría de Economía sostiene que el gobierno federal ha gastado 200 millones de pesos, de los 2 mil millones destinados al programa de paros técnicos, y reconoció que sólo 10 por ciento de los recursos totales aprobados se han entregado a los afectados, a pesar de que el programa arrancó hace más de cuatro meses.

Sin embargo, recientemente el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, afirmó que los apoyos se rembolsarán a las empresas una vez que hayan concluido los paros y que comprueben que cumplieron con los requisitos. Los recursos no se dan con anterioridad, sino cuando concluye el paro técnico y se comprueba que la disminución de días trabajados y la planta de trabajadores no fue en exceso a la tercera parte de la caída de las ventas de un periodo, explicó el funcionario federal.

Agregó que las empresas que lo requieran podrán solicitar la ayuda, todos son candidatos a ser beneficiarios de esos apoyos, pero se tiene que comprobar que terminado el periodo de paro técnico se cumplió a cabalidad con los requisitos establecidos en las reglas de operación.

El representante de Canacintra confirmó que la ayuda del programa de paros técnicos sólo cubre a las firmas de la industria automotriz, de autopartes, maquinaria y electrónica, y consideró que el mecanismo que señala el secretario del Trabajo será un problema serio para las empresas que tienen problemas de liquidez, porque no todas van a poder financiarse solas.

La queja del sector es que los recursos no llegan con oportunidad y la buena intención (del programa) se pierde porque se requieren los recursos para evitar los despidos, dijo Jaramillo, quien expresó que en tanto no se modifiquen todos los requisitos, van a ser muy pocas las empresas que puedan beneficiarse.

El representante de Canacintra subrayó que el desempleo se ha disparado como nunca antes en la zona.