El representante del Partido Acción Nacional (PAN) ante el Instituto Federal Electoral (IFE), Roberto Gil, advirtió que seguirán exhibiendo el pasado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y le pidió que no rehúya el debate al escudarse en la autoridad electoral, a la que pide tutelas o censuras. En entrevista con La Jornada, sostuvo que no se trata de una guerra sucia ni de generar estrategias de enfrentamiento y de odio. Simplemente es una campaña de contrastes, dijo.

Si el PRI quiere señalar los errores del gobierno de Calderón, que lo haga, sostuvo el panista. Que señalen nuestros errores u omisiones, que nos critiquen, nosotros no vamos a recurrir a la autoridad electoral para pedir tutelas o censuras. Nosotros estamos preparados para responder a las críticas del PRI con datos, con resultados, con logros de gobierno, pero lo que no estamos dispuestos a hacer es callarnos para que (ese partido) no se enoje.

Gil agregó: “Eso de la guerra sucia es un discurso que están utilizando algunos con el propósito de evadir críticas, de cancelar el debate, para que no sea objeto de escrutinio y de debate público la gestión de los gobiernos del pasado. Creemos que en la democracia se tienen que debatir intensamente los asuntos públicos, y el pasado del PRI lo es”.

El representante del blanquiazul ante el IFE agregó que nuestra estrategia política no apela a la violencia, nuestro debate es pacífico, es intenso, pero no apela a generar odio ni encono entre los mexicanos; es el debate propio de una democracia, duro, ríspido, así se forma la voluntad electiva de los ciudadanos.

Apuntó: “Dicen algunos priístas que es el discurso del miedo; nos negamos a aceptar eso; quienes están diciendo que se generarán males nacionales si nosotros seguimos con este debate de mostrar a la población quiénes son los priístas, lo que en realidad el tricolor está diciendo a Acción Nacional es cállense, porque si no vendrán divisiones entre los mexicanos; esa no es sino una estrategia para silenciar las críticas, es una forma de acallar la democracia”.

Advirtió: “Vamos a continuar con el debate sobre el pasado del PRI; es muy importante que los mexicanos sepan los haberes de los gobiernos priístas; este debate es cada vez más importante, pues sólo hay que ver la lista de los candidatos de ese partido: presenta las mismas caras de siempre, personas que hace dos décadas eran diputados y que vitoreaban las decisiones de privatización de la banca de José López Portillo, pero no quieren que les critiquen la acción gubernativa del pasado. Nosotros no compartimos bajo ninguna circunstancia ese razonamiento y por ello seguiremos con nuestra estrategia.

Que nos pruebe que en una democracia no debe discutirse el pasado, las deudas, las crisis económicas, la inflación galopante, las devaluaciones, el crecimiento del narcotráfico. Sí, porque ese fenómeno, el narcotráfico, creció al amparo de los gobiernos del Partido Revolucionario Institucional. De eso se trata, de mostrar quiénes son los priístas, porque una sociedad no puede construir el futuro si no aprende de su pasado.

El panista aseguró que no creemos que la censura sea la ruta correcta para la democracia; en una democracia madura, como la que queremos, el debate intenso es parte fundamental en la vida.