Antes de que en el mundo existieran todos los idiomas había un recurso infalible que incluso hoy, miles de años después, puede hacer que dos seres humanos se comuniquen y se entiendan: hablar con señas.

A partir de esta capacidad innata que tenemos las personas, la compañía teatral Seña y verbo decidió combinar el lenguaje hablado con el de señas que utilizan los sordomudos, y este fin de semana comenzó su nuevo ciclo de presentaciones, que incluye las obras infantiles Uga, El rey que no oía pero escuchaba y ¡¿Quién te entiende?!

Dentro del programa Teatro para todos, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Seña y verbo utiliza también el teatro de títeres y de objetos para contar en Uga la historia de Carolina, una niña de campo que conoce a tres amigos que no pueden oír, quienes le enseñan una nueva forma de jugar sin utilizar la voz.

La compañía, dirigida por Alberto Lomnitz, tiene 15 años de experiencia combinando a actores oyentes y sordos, con el propósito de presentar obras de calidad en las que ambos públicos se diviertan, pero también se transformen, al acercarse a nuevas formas de expresión.

Experiencia en otro universo

Me considero privilegiada por estar aquí, porque se me abrió todo un universo que yo no conocía. Es aprender otra cultura, muy distinta a la nuestra; eso también me enriqueció como actriz, afirmó en entrevista la directora y guionista de Uga, Haydée Boetto.

Para la creadora, aprender el lenguaje de señas significó afrontar las puestas en escena desde un punto de vista más esencial, dedicada a cosas menos superficiales, primero por trabajar en silencio y después porque ello te hace ejercitar otra parte de tu sensibilidad. Siento que ahora entiendo mejor el espíritu y la médula de las escenas y el conflicto.

Las tres obras que presenta Seña y verbo están pensadas para un público infantil y juvenil, y fueron escritas con base en un trabajo de campo realizado por sus integrantes, en el que averiguaron de qué hablan los niños y jóvenes, cuáles son sus intereses y qué les hace sentir conflictuados.

Aunque los niños no tengan conocimiento previo de esta forma de expresión, el lenguaje de las señas es bastante orgánica, hay muchas que se pueden entender y que se gestaron de otras universales, como juntar las dos manos y recargarse en ellas para decir dormir. Va a ser muy interesante ver cómo reacciona el público, consideró Boetto.

El trabajo de esta compañía, agrega, está encaminado a generar una cultura de respeto y comprensión hacia la discapacidad. Falta mucho todavía, por eso es importante tratar de acercar al público a otras culturas mediante el teatro. Hay que divertir y hacer entender de la misma manera.

Con las actuaciones de Roberto de Loera, Eduardo Domínguez, Carolina Garibay, Jacobo Lieberman y Jofrán Méndez, Uga se presentará sábados y domingos a las 12:30 horas, del 4 al 26 de abril, en el teatro Julio Prieto, Xola 809, entre Nicolás San Juan y Gabriel Mancera.

En ese mismo recinto y horario se montarán El rey que no oía pero escuchaba (del 2 al 24 de mayo) y ¡¿Quién te entiende?! (del 30 de mayo al 14 de junio). Mayores informes en la página www.teatrodesordos.org.mx