Busca evitar daños al ambiente: Semarnat
Martes 24 de marzo de 2009, p. 42
La ausencia de sonidos de flora y fauna son señal del deterioro del medio ambiente, por lo que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) buscará establecer una agenda de ecología acústica para evitar las prácticas que ponen en riesgo de extinción de esos sonidos, señaló Sandra Herrera, subsecretaria de Fomento de la dependencia, durante la inauguración del Foro Mundial de Ecología Acústica.
En la Fonoteca Nacional, la directora del organismo, Lidia Camacho, sostuvo que la ecología acústica aboga por una conciencia social en torno de la importancia del sonido en nuestas vidas y por el desarrollo de seres sensibles que sean aptos para detectar las transformaciones que se presentan.
Ahí, el presidente del foro, Nigel Frayne, destacó que los sonidos de la naturaleza repercuten en el comportamiento reproductivo y migratorio de algunas especies. El sonido, dijo, influye también en la conducta del hombre, como lo revelan investigaciones neurológicas recientes, las cuales asocian el uso intensivo de las nuevas tecnologías, como las computadoras, con una mayor incidencia de autismo.
Aseguró que el tema de la ecología acústica cobra importancia a escala mundial, pero con diferencias, ya que mientras algunos países apenas han comenzado su análisis, otros ya aprovechan los beneficios y han creado espacios con los sonidos de la naturaleza para que la gente se relaje.
Dijo que aunque muchas veces no se utiliza la ecología acústica, se observa un cambio en la manera de describir la relación entre los seres vivos y su entorno acústico. Dicha modificación ha dado pie a gran número de actividades y proyectos en todo el planeta
. El auge de la era del audio digital es fuente de inspiración de varias universidades, que ya han iniciado proyectos para desarrollar nuevas herramientas de análisis del entorno acústico.
Sandra Herrera sostuvo que muchas aves, insectos, mamíferos acuáticos y terrestres necesitan oírse para encontrar pareja, pero ante el exceso de ruido su sobrevivencia se ve comprometida, inclusive amenazada, ante los efectos de actividades humanas
.
Dijo que investigaciones demuestran que los ruidos ocasionados por el hombre inciden en la saturación del medio ambiente. Los motores de los barcos, el cambio climático y la contribución de éste en el incremento de la acidez del agua marina provocan contaminación sonora en el mar, lo que hace insostenible la vida de especies que dependen del sonido para encontrar alimento.