Madrid, 23 de marzo. El juez de la Audiencia Nacional española, Baltasar Garzón, decidió procesar a 44 miembros de la proscrita coalición Batasuna y de otras dos formaciones independentistas, a los que acusa de integración de banda armada por su supuesta vinculación a la organización armada vasca ETA.

Entre los imputados se encuentras destacados dirigentes de la izquierda abertzale (nacionalista) como Joseba Permanch, Pernando Barrena, Juan José Petrikorena y Rufino Etxebarria.

El auto de Garzón sostiene además que las formaciones políticas proscritas Acción Nacionalista Vasca (ANV) y el Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) forman parte del entramado de ETA, por lo que sus dirigentes y cargos públicos forman parte del grupo armado.

Este mismo razonamiento fue el utilizado por el magistrado para enviar a prisión a algunos de los miembros de la antigua Mesa Nacional de Batasuna, como Arnaldo Otegi, quien en agosto pasado cumplió con una condena de 15 meses.

Garzón argumentó que ETA instrumentaliza, tanto política como económicamente a estas formaciones, además de que utilizaría los recursos públicos obtenidos de su presencia en las instituciones vascas. En palabras del magistrado se creó un frente institucional del complejo terrorista que sirvió para el sostenimiento del entramado político.

Afirmó, asimismo, que los responsables de PCTV y de ANV se han plegado a las directrices de Batasuna, como es el caso del presidente de Acción nacionalista Vasca, Kepa Bereziartua, y la actual alcaldesa de Arrasate-Mondragón, Inocencia Galarsoro, quien tras ingresar en prisión quedó en libertad bajo fianza de 30 mil euros.

En febrero de 2008 Garzón decretó la suspensión de actividades del PCTV y de ANV, cosiderados satélites de Batasuna –que a su vez fue proscrita desde 2003–, lo que evitó que pidieran concurrir las elecciones generales de marzo de ese año.