El dirigente nacional del Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya, y el coordinador de los senadores de este instituto político, Ricardo Monreal, viajaron ayer a Monterrey para disolver la alianza estatal con el PRI, hecho que formalizaron por la noche al anunciar la ruptura del acuerdo suscrito hace 19 días para los comicios de gobernador, diputados locales y ocho alcaldías.

Ambos políticos participaron en varias reuniones con dirigentes locales y estatales de PT y PRI, incluido el gobernador Natividad González Parás. En ese contexto confirmaron la decisión de terminar con la alianza que provocó la inconformidad de Andrés Manuel López Obrador, del propio Monreal, de la senadora Rosario Ibarra y del coordinador del Frente Amplio Progresista, Porfirio Muñoz Ledo.

La decisión se dio a conocer tres días antes de la celebración de Consejo Político Nacional del PT, propuesta para el próximo miércoles, donde se esperaba que el tema fuera analizado y votado por sus cerca de 100 integrantes. Desde el lunes pasado, López Obrador dejó en claro la oposición del movimiento que encabeza a un acuerdo con PRI y PAN.

Al día siguiente le pidió a la dirigencia nacional petista reconsiderar esa alianza y el jueves, al participar en el 13 seminario internacional Los partidos políticos y una nueva sociedad, organizado por el PT, pidió no confundirse: la derecha en México son PRI y PAN; representan lo mismo.

Finalmente ayer, en Monterrey, mediante un breve comunicado de prensa de nueve líneas, Alberto Anaya y Miguel Angel Lozano Munguía, presidente estatal del PRI, expusieron que por así convenir a nuestros intereses dejamos sin efecto el acuerdo formal suscrito el 3 de marzo para conformar una coalición entre los partidos abajo firmantes.

Asentaron que la disolución del acuerdo se dio en razón de circunstancias supervinientes que han atendido a una determinación del Frente Amplio (PRD, PT y Convergencia) de no suscribir en ninguna entidad federativa coaliciones políticas con partidos distintos a los integrantes de este frente.

Puntualizaron que sus respectivos representantes partidistas notificarán el acuerdo a la Comisión Estatal Electoral, para que la disolución tenga validez legal. Anaya comentó –fuera del texto mencionado– que se trata de un acuerdo que manifiesta la voluntad de las partes, toda vez que las estrategias nacionales de sus respectivos partidos y el FAP tienen estrategias que no armonizan la firma de este convenio.

Lozano Munguía precisó que la coalición Juntos por Nuevo León, de la que se salió el PT, continuará con la participación del PVEM y los partidos locales Demócrata y Cruzada Ciudadana. El PT tiene hasta el 10 de abril para registrar candidatos. Dentro de la coalición Juntos por Nuevo León, el PRI le había cedido tres de los 26 distritos locales y la candidatura por la alcaldía de Santa Catarina, a cambio de apoyar a su abanderado por la gubernatura, Rodrigo Medina, a la que se esperaba que el PT aportara 7.5 por ciento de la votación global.