Quito, 22 de marzo. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, afirmó hoy que Colombia tiene desprotegida la frontera común, lo que permite a las bandas delictivas colombianas actuar contra los ecuatorianos. Colombia tiene un serio problema interno de guerra civil y de inseguridad, insistió en una entrevista con el canal estatal TC.

Señaló que muchos colombianos del área limítrofe dan apoyo a la guerrilleros y paramilitares, mientras que bandas delictivas colombianas actúan desde Colombia contra Ecuador por la ausencia del Estado colombiano en su frontera sur. Extorsionan a los dueños de las fincas, secuestran, contrabandean, y se refugian en Colombia, donde no podemos hacer nada como fuerza pública ecuatoriana, dijo.

El presidente ecuatoriano, que rompió relaciones diplomáticas con Colombia tras un ataque militar colombiano contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en territorio de Ecuador el primero de marzo de 2007, que dejó 25 muertos, incluido el comandante rebelde Raúl Reyes, explicó que unos 300 mil colombianos viven en este país, en cuya frontera hay pueblos donde 80 por ciento de los habitantes es de esa nacionalidad.

De su lado, el diario ecuatoriano El Comercio, que citó informes de inteligencia, indicó que un guerrillero de las FARC, al que identificó como Fredi Castillo, participó en el Plan Ecuador, la contraofensiva en Quito al antidrogas Plan Colombia, y que el gobierno mantiene en la frontera con ese país.

En Colombia, en tanto, el diario colombiano El Tiempo indicó que los cuatro guerrilleros que sepultaron el pasado a Manuel Marulanda, Tirofijo, habrían sido asesinados por orden de la compañera de los últimos años del líder histórico de las FARC, con el fin de asegurar el secreto del lugar donde está la tumba.

La información fue proporcionada por una guerrillea que se identificó como Berta, quien aseguró ser pareja de José, uno de los cuatro guerrilleros abatidos; el rotativo señaló que las autoridades dieron credibilidad a la denuncia.

La muerte de Marulanda, el 26 de marzo de 2008, sólo fue dada a conocer por el grupo rebelde dos meses después de ocurrida, y desde entonces las autoridades buscan su tumba.