Los senadores del PRI no asistirán a la consulta convocada por el presidente Felipe Calderón para decidir dónde se ubicará la nueva refinería de Pemex, porque se trata de una pérdida de tiempo, en razón de que la decisión ya está adoptada y los foros se realizarán para justificarla, manifestó el presidente de la Comisión de Energía, Francisco Labastida.

Por su parte, la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados hizo un llamado a la Secretaría de Energía a que tome inmediatamente la decisión sobre la entidad en que se construirá la refinería y recordó que para este año se aprobó, en el Presupuesto de Egresos de la Federación, una partida específica para arrancar el proyecto que contribuirá a reducir las importaciones de gasolinas.

En un comunicado, emitido después de sostener una reunión para analizar el tema, la mesa directiva de esa comisión consideró inaceptable que, ante la situación de crisis que atraviesa el país, los recursos del presupuesto no se ejerzan con la celeridad que se requiere en un proyecto en el cual deben privar sólo criterios técnicos, financieros y económicos, no políticos.

En el Senado, Labastida recalcó que no va a servir de nada esta pasarela de presentación de proyectos, porque el criterio ya está tomado y no se va a alterar la decisión con la presencia de los gobernadores y los interesados en que la refinería quede en sus estados.

El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, pidió al gobierno federal que se ponga las pilas y acelere todo lo concerniente a ese proyecto que tanta falta hace al país. Nosotros no compartimos la lentitud, la parsimonia del Ejecutivo, porque, para decirlo con claridad, es un gobierno pachorrudo, insistió.

En tanto, el coordinador de los senadores panistas, Gustavo Madero, defendió la propuesta del jefe del Ejecutivo: Yo creo que es una decisión administrativa; el presidente Calderón lo quiere hacer con un proceso abierto, plural, y creo que eso tiene mucho de rescatable.

Representantes de PRD, PRI y PT en la Cámara de Diputados criticaron el anuncio presidencial: El gobierno federal es el único ente capacitado para decidir dónde se edificará el complejo petrolero; la postura de Felipe Calderón es omisa porque se ha tardado más de cuatro meses en tomar una decisión, nos demuestra una vez más su notable incapacidad para conducir las riendas del país, señalaron.

Emilio Gamboa, coordinador del PRI en San Lázaro, avizoró una conflictiva política entre los estados que pujan por ganar la decisión: Me parece que vamos a caer en una división. No conviene a nadie. Es una decisión del gobierno, que por eso es gobierno; que diga por qué, técnica y financieramente, la refinería debe instalarse en algún estado. Ellos son los expertos. Y esto ya se convirtió en una decisión electorera y política a ver quién gana la nueva refinería.

Javier González Garza, coordinador de la bancada del PRD, manifestó que la decisión debe ser técnica y lo único que se está propiciando es confrontar a los gobernadores interesados.

Por su parte, el Partido Socialdemócrata consideró que la decisión del gobierno representa una muestra más de debilidad y de incapacidad a la hora de adoptar decisiones. El dirigente Jorge Carlos Díaz Cuervo dijo que no se puede chantajear con la construcción de una inversión multimillonaria, como es una refinería.