Washington, 18 de marzo. Estados Unidos llevó a cabo con éxito una prueba de su sistema terrestre de defensa antimisiles al interceptar un misil balístico de corto alcance en el archipiélago de Hawai, en el Pacífico, anunció hoy el Pentágono. El misil al que se apuntó el martes tenía un alcance menor a mil kilómetros, precisó la Agencia de Defensa Antimisil (MDA).

El lanzamiento se realizó en momentos en que se espera que Corea del Norte lance un satélite de telecomunicaciones, entre los días 4 y 8 del próximo mes.

Washington sospecha que el operativo puede ser una nueva prueba de misil de largo alcance, susceptible de alcanzar Alaska.

Algunos científicos y legisladores estadunidenses ponen en duda la eficacia del programa de escudo antimisiles que su país pretende ampliar hacia Polonia y República Checa, y critican su costo.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aún no toma una decisión e indicó que respaldaba el proyecto desarrollado por su predecesor, George W. Bush, si era tecnológicamente adaptado y económicamente sostenible.

Por lo pronto, un alto responsable ruso declaró que la entrega de misiles rusos tierra-aire a Irán, destinados a proteger sitios estratégicos, dependerá de la evolución de la situación internacional.

La ejecución del contrato dependerá mucho de la evolución de la situación internacional y de las decisiones de los dirigentes del país, dijo una alta fuente del Servicio Federal ruso de Cooperación técnico-militar citada por las agencias Interfax y Ria Novosti.

Está claro que Estados Unidos prepara un arreglo, sugiriendo a Rusia que renuncie a la cooperación técnico-militar con Irán o limitándola, a cambio, a abandonar el proyecto de escudo antimisiles estadunidense en Europa, estimó este miércoles Ruslan Pujov, director del Centro de Análisis para Estrategias y Tecnologías a la radio Echos de Moscú.

Pujov consideró que ese acuerdo es altamente probable y consideró que no es equitativo, pues los estadunidenses renuncian a su escudo (...) por razones internas y nos obligan a renunciar a vender armas a Irán prácticamente sin dar nada a cambio, agregó.