Atlante cerró en el estadio Neza 86 su preparación rumbo al encuentro de semifinales de la Concachampions, este miércoles frente a Santos, con la certeza de que hace lo correcto al tratar de recuperar para México la superioridad en la zona a nivel de clubes, y por otro lado con la confianza en que el torneo local es recuperable.

Antes de viajar a Torreón, el cuadro que dirige José Guadalupe Cruz hizo una breve visita al estadio que lo acogió por años, el Neza 86, hoy abandonado por el tiempo.

Aquí jugué muchos partidos, siempre hay buenos recuerdos. Aparte, hay mucha gente que nos sigue desde esta región de la ciudad, expresó el profe Cruz, quien se mostró comprensivo por el estado de la instalación en la que se desempeñó como jugador y en parte se desarrolló como técnico.

Se entiende, no es fácil mantener un monstruo como éste. La verdad es una lástima, porque es un estadio mundialista, pero ojalá la gente lo pueda aprovechar al máximo, sobre todo los chavos de fuerzas básicas, dijo.

Si bien el tránsito hizo pesado el camino, ni eso ni el dolor por la derrota ante Pumas que aún se percibe abatió la práctica de los Potros y su objetivo de lograr la combatividad que exige el cuadro de la Comarca Lagunera en su estadio.

Como todos los partidos, éste será complicado, máxime que hablamos de una instancia semifinal, asentó Cruz.

Siempre el juego de ida, sin ser definitivo, es importante, así que vamos a tratar de jugar sin ningún tipo de cobardía. Trataremos de buscar algún gol que nos permita ir más tranquilos a Cancún, precisó.

Para Cruz, el hecho de que tres equipos mexicanos (Atlante, Santos y Cruz Azul) estén aún en la Copa de Campeones de la Concacaf significa que estamos en el camino correcto, que le hemos dado seriedad a este torneo y siempre será importante que a nivel de clubes se retome esa superioridad futbolística que había en la región. La hemos perdido, esa es la realidad, y a nosotros nos corresponde tratar de recuperarla.