Miles de electricistas marcharon ayer para exigir aumento salarial de 17.2 por ciento
Martín Esparza culpa a la titular de Energía de obstaculizar la negociación con los trabajadores
Jueves 12 de marzo de 2009, p. 45
Decenas de miles de electricistas se manifestaron ayer en el Zócalo capitalino, en una movilización en la que denunciaron que la política laboral del gobierno actual mantiene un fuerte castigo
a los obreros mexicanos, ya que permite la fijación de sueldos míseros, que se impongan topes a los aumentos salariales y se recorten prestaciones
.
“Sin embargo –señalaron–, ha dejado las puertas abiertas para que los grandes capitales especulen, se roben los ahorros para el retiro y se coman las reservas internacionales.”
Se ha seguido una política de todo para los empresarios y nada para los trabajadores
, lo que ha agudizado la desigualdad social en el país, además de que se mantiene una clase de privilegio y una alta burocracia, con los salarios más altos de todo el mundo, mientras que al mínimo se le incrementan 2.20 pesos por día, señalaron los líderes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), en la marcha que realizaron ayer desde el Monumento a la Revolución.
Vestidos con playera roja y acompañados por diversas organizaciones gremiales, como los sindicatos de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México y el de Trabajadores Académicos de la Universidad Autónoma Chapingo, así como la Alianza de Tranviarios, los electricistas denunciaron que las autoridades de Energía del país no han querido sentarse a negociar la revisión salarial de este año.
Martín Esparza, dirigente del SME, señaló que a casi cinco días de que venza el emplazamiento a huelga, hay 99 por ciento de probabilidades
de que se coloquen las banderas rojinegras en la paraestatal, porque no hay ningún ofrecimiento de las autoridades.
Consideró que Luz y Fuerza del Centro tiene fondos para dar el aumento de 17.2 por ciento que demandan los trabajadores, pues en 2008 tuvo ventas por 50 mil millones de pesos, de las cuales –afirmó– el costo de la nómina representa 39 por ciento.
“Sin embargo –dijo–, es la titular de la Secretaría de Energía, Georgina Kessel, quien se ha encargado de obstaculizar cualquier negociación con el SME.” Mientra decía esto, los trabajadores empezaron una rechifla y corearon: ¡Huelga! ¡Huelga!
Durante la movilización –según los organizadores aglutinó a 150 mil trabajadores– escenificaron diversos performances con los que reforzaron su demanda de incremento salarial. Los principales blancos de sus reclamos fueron el mandatario Felipe Calderón y el secretario de Hacienda, Agustín Cartens, de quienes llevaron grandes monigotes de papel. Quemaron en el Zócalo el que personificaba al encargado de la política financiera y económica del país.
Con pancartas que rezaban: “Switch abajo, en defensa del trabajo”. Por una tarifa social: que paguen menos los que menos tienen
, trabajadores de todas las secciones del SME se unieron a la marcha, que amenizaron con cohetones y consignas contra el gobierno.
Pero la movilización de los electricistas no se constreñirá a su revisión salarial, ya que pasado el 16 de marzo –fecha en que vence el emplazamiento– irán al Congreso de la Unión a demandar la restatización de los fondos de pensiones
, debido a que con el pretexto de la crisis –dijo Esparza Flores–, a los trabajadores mexicanos ya les hicieron perdedizos 72 mil millones de pesos de sus fondos de ahorros, y todavía tuvieron el descaro de decir que eran minusvalías
. ¡Qué poca madre!
, respondieron al unísono los manifestantes.