Martes 10 de marzo de 2009, p. 17
El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, pidió a México valorar su participación en las operaciones de paz de la Organización de Naciones Unidas (ONU), ya que, dijo, una gran nación tiene derechos, pero también deberes
y entre estos últimos está el precio de la sangre de sus soldados
.
En el discurso que pronunció ayer ante el pleno del Senado, durante una sesión solemne a la que asistieron los presidentes de ambas cámaras del Congreso, Sarkozy recalcó como amigo y como socio
que el mundo espera más de México
y, por ello, aunque se trata de un tema delicado, alentó a los legisladores a seguir en el debate de la posible intervención de las fuerzas armadas mexicanas en conflictos bélicos mundiales, como parte de los llamados cascos azules de la ONU.
Durante los 30 minutos que duró su intervención ante la tribuna del Congreso, Sarkozy fue varias veces ovacionado, pero no cuando propuso la colaboración de México con contingentes armados y tampoco al aludir al caso de la secuestradora Florence Cassez.
Recordó que la Unión Europea –a la que él propuso, sostuvo, hacer de México un socio estratégico– reconoció sus responsabilidades globales. Queridos amigos mexicanos, ustedes tienen más responsabilidad de lo que a veces se piensa.
Antes, el presidente del Senado, Gustavo Madero, le dio la bienvenida en un mensaje en que resaltó las coincidencias entre ambas naciones. Pero, mientras el panista disertaba sobre las revoluciones francesa y la mexicana, movimientos que marcaron el mundo por su legado social y liberal
, el mandatario visitante se dedicó a intercambiar gestos amorosos con su esposa, Carla Bruni, quien estaba justo enfrente de Sarkozy, debajo de la tribuna senatorial, en compañía de la canciller Patricia Espinosa y su esposo, el mandatario de Francia, le sonreía y le enviaba besos.
Durante su intervención, propuso relanzar la relación entre México y Francia, por medio de lo que llamó los cinco soles
, sacó a relucir que ha abogado
por la apertura del Grupo de los ocho a los grandes países emergentes y por su transformación en el G-14, donde México tiene su lugar
.
Propuso volver a los valores fundamentales de la economía de mercado
, los que han sido traicionados por la codicia e irresponsabilidad de una pequeña minoría
. México y Francia, resaltó, deben rechazar cualquier intento de proteccionismo.
Sarkozy pidió también a México luchar conjuntamente contra la emigración ilegal, contra el cambio climático global y aprovechó para externar su deseo de visitar el Mar de Cortés.