Cuernavaca, Mor., 5 de marzo. El alcalde de esta capital, el panista Jesús Giles Sánchez, advirtió que no se derogarán las modificaciones al bando de policía y buen gobierno que aprobó el cabildo en noviembre anterior, las cuales prohíben a la gente ganarse la vida en la vía pública.

El funcionario insistió en que el ordenamiento del comercio ambulante y el retiro de las personas que ofrecen servicios en la calle son para brindar seguridad a los habitantes y turistas de Cuernavaca.

Argumentó que el ayuntamiento ofrecerá trabajo temporal con un ingreso equivalente a dos salarios mínimos a las personas que realizan actividades como limpiar parabrisas en los semáforos. Por lo pronto, el cabildo acordó en sesiones recientes que se reubicará a las artesanas indígenas que venden sus productos en el zócalo de la ciudad.

“Hay un trabajo conjunto con (la Comisión Estatal de) Derechos Humanos. Estamos levantando el censo para ver cuántas de estas personas son de aquí y cuáles no; ha habido grupos que han satanizado este tema, que lo han tomado como bandera política. Seguiremos trabajando en torno a un proyecto de ciudad que no es de Giles, sino de los cuernavaquenses.

Lamentablemente algunas de las gentes que se encuentran en las esquinas sustraen las pertenencias de los que pasan por ahí, dijo el alcalde durante un recorrido que hizo este jueves por el primer cuadro de Cuernavaca.

Si queremos ser competitivos ante la crisis económica mundial, el turismo, el famoso tercer sector de la economía, puede representar para Cuernavaca una tablita de salvación. Cuernavaca se va a mostrar como una ciudad segura y limpia, agregó.

Jesús Giles aseguró que la Comisión Estatal de Derechos Humanos trabaja con la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia para elaborar un censo de las personas que realizan alguna actividad lucrativa en los cruceros viales de la capital de Morelos.

El alcalde insistió en que todavía no se aplican las modificaciones al bando municipal. No obstante, la policía ya ha detenido a varias personas por pretender trabajar en la vía pública. En el zócalo, policías e inspectores del ayuntamiento impiden a mujeres artesanas vender sus productos. Cuando las descubren, les decomisan sus artesanías y les imponen una multa.