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Algunas autoridades reaccionan como si la comisión fuera el enemigo

Critica la CNDH falta de respuesta del gobierno ante la trata de personas
 
Periódico La Jornada
Jueves 5 de marzo de 2009, p. 12

El presidente de la  Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes Fernández, lamentó la escasa respuesta del gobierno federal para combatir el delito de la trata de personas que, aunque, dijo, es un fenómeno de extensión mundial, tiende a convertirse en un problema de seguridad nacional, ya que crece con gran rapidez, como una variante más del crimen organizado.

El ombudsman nacional puso de relieve la urgencia de adoptar políticas integrales que permitan un combate más frontal de las bandas que desde México comercian, con personas, a veces mediante la contratación ilegal de ciudadanos a los que se engaña con promesas de trabajo en el extranjero.

Entrevistado en Chetumal, Quintana Roo, Soberanes Fernández refirió que el poco interés de las autoridades federales por atender esta problemática se evidencia, ente otros puntos, en el rechazo a recientes recomendaciones de la CNDH para casos documentados de trata de personas.

Algunas autoridades reaccionan como si este organismo nacional fuera el enemigo a vencer, heco que alimenta la elevada impunidad con la que opera ese negocio ilícito, indicó.

Al final de su intervención, en la presentación del informe de actividades del presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, el titular nacional comentó el caso de los 65 mexicanos que fueron engañados y llevados a trabajar a Bahamas en condiciones de práctica esclavitud, se les retuvieron sus documentos migratorios y fueron sometidos a tratos ilegales.

El titular del organismo hizo un llamado a las autoridades federales a poner mayor atención a este problema en la zona fronteriza, así como tener mayor coordinación de esfuerzos entre las instituciones responsables de prevenir y perseguir la trata de personas.

En su mensaje, el presidente de la CNDH insistió en que ninguna política o estrategia de lucha contra la delincuencia puede justificar que se incurra en abierta violación de los derechos fundamentales. “No se debe ni se puede –sin graves consecuencias– combatir el crimen transgrediendo nuestro orden constitucional y los instrumentos internacionales que México ha firmado”, puntualizó.