La renuncia del primero al consejo del banco generó versiones de que adquiriría Banamex
El valor del grupo era de 6,190 mdd, menos de la mitad de lo que pagó por la firma mexicana
Jueves 5 de marzo de 2009, p. 23
Mientras las autoridades financieras mexicanas no logran interpretar la ley para determinar si Banamex, la filial en México de Citigroup, debe conservar su licencia para operar, Roberto Hernández Ramírez y Manuel Medina Mora, dos de los más altos funcionarios de ese grupo, adquirieron esta semana acciones del consorcio estadunidense por las que pagaron 7 centavos por cada peso de valor que tenían los mismo títulos hace menos de un año.
Información divulgada por la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) señalan que Roberto Hernández, presidente de Banamex, adquirió 6 millones de acciones de Citigroup el 2 de marzo, a un precio de 1.25 dólares por título, 7.5 millones de dólares, equivalentes a 115.7 millones de pesos al tipo de cambio de mayoreo de ese día.
Por su parte, Manuel Medina Mora, jefe de las operaciones de Citigroup en México y América Latina, compró 1.5 millones de acciones del grupo estadunidense a un precio de 1.24 dólares, lo que implicó el pago de un millón 860 mil dólares, unos 28 millones 529 mil pesos al tipo de cambio del día.
La compra de acciones realizada por Hernández y Medina Mora ocurre dos semanas después de que The Wall Street Journal reportó que el primero de ellos, junto con Alfredo Harp Helú, también directivo de Banamex, estaban reuniendo inversionistas para presentar una postura de compra de Banamex, cuyo precio a valor de mercado se ubica en alrededor de 8 mil millones de dólares, menos del valor actual de mercado de Citigroup. Ambos ejecutivos negaron esa versión.
Ganancias en México y pérdidas en Estados Unidos
Sin embargo, la semana pasada, Roberto Hernández renunció como miembro del consejo de administración de Citigroup, lo cual alimentó las versiones de que preparaba una oferta de compra para adquirir Banamex, el mismo banco que en 2001 él y Harp Helú vendieron a Citigroup por 12 mil 500 millones de dólares, a través de una operación en la Bolsa Mexicana de Valores que los eximió del pago de impuestos.
Ayer, el valor de mercado de Citigroup, una institución que por décadas fue el emblema del poderío del sistema financiero estadunidense, se ubicó en 6 mil 190 millones de dólares, según reporte del mercado de valores de Nueva York, menos de la mitad de lo que hace ocho años pagó por Banamex. En un año, el valor de las acciones de Citi reporta un derrumbe de 95.8 por ciento. Su máxima cotización fue de 27.35 dólares y cayó ayer a 1.13 dólares, en la bolsa de Wall Street.
El pasado viernes 27 de febrero, el gobierno de Estados Unidos se convirtió en propietario de 36 por ciento del capital social de Citigroup y, por tanto, en accionista de Banamex. El artículo 13 de la Ley de Instituciones de Crédito, que regula la operación de los bancos en el país, prohíbe que una autoridad del exterior sea accionista en un banco con operaciones en México.
Para tratar de salvar esa prohibición, Banamex invocó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el cual, según la interpretación del banco, permite este tipo de operaciones cuando son de carácter temporal.
No obstante, las autoridades mexicanas no se han pronunciado al respecto, aun cuando la intervención del gobierno estadunidense como accionista de Citigroup tiene dos meses. Banqueros consultados consideraron que es alta la probabilidad de que Banamex sea vendido por Citi, no tanto porque las autoridades hacendarias de México vayan a hacer una interpretación literal de la ley, sino por la presión política al gobierno de Estados Unidos por reducir el costo a los contribuyentes del rescate de Citigroup, a través de la venta de su subsidiaria.
Banamex es el segundo banco más importante en México, después del BBVA Bancomer. En 2008 logró utilidades por un monto equivalente a 880 millones de dólares, mientras que su casa matriz, Citigroup, tuvo pérdidas en el mismo ejercicio por 18 mil 715 millones de dólares.
La frágil situación del ex gigante financiero mundial se ha reflejado en la caída de sus acciones, tanto en la bolsa de Wall Street como en el mercado bursátil mexicano. El 28 de abril de 2008 sus títulos se cotizaban en 273.53 pesos en la bolsa local, y hoy se ofrecen 17.87 pesos o menos por ellos: un desplome de 93.46 por ciento en 11 meses.
Las 7.5 millones de acciones adquiridas por Roberto Hernández y Medina Mora equivalen a 0.13 por ciento de los 5 mil 476.2 millones de títulos en circulación de Citigroup. A finales del año pasado, Carlos Slim Helú, el magnate de las telecomunicaciones en México, compró uno por ciento de las acciones de Citi. Este martes Slim, quien detenta la participación mayoritaria del grupo financiero Inbursa, aseguró que no tiene interés en hacerse de Banamex.
Otros bancos que operan en México han recibido en los últimos meses apoyos financieros de sus gobiernos, aunque no en todos los casos los apoyos han implicado la entrega de una parte de las acciones. Entre éstos figuran Bank of America, de Estados Unidos; HSBC y Barclays Bank, de Inglaterra; y la Caixa, español y que tiene participación en Inbursa.