Militares hallan juguetes, mochilas y equipo de radiocomunicación
Sábado 28 de febrero de 2009, p. 28
Monterrey, NL, 27 de febrero. Los siete policías del municipio de Salinas Victoria detenidos porque supuestamente pretendieron secuestrar a una pareja y retuvieron a su hijo de tres años de edad, revelaron al Ejército la existencia de una casa de seguridad
en la que fueron encontrados juguetes y mochilas con útiles escolares, parecidas a las que fueron entregadas a los manifestantes que los primeros días de febrero bloquearon avenidas de la capital regiomontana, y ya se les conoce como tapados.
En la finca, ubicada en Allende 530, colonia Gobernadores de este municipio, ubicado a 30 kilómetros al norte de Monterrey fueron halladas tres antenas de radiocomunicación, sin el permiso para operar de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, por lo cual fueron desmanteladas.
Según el reporte de la séptima Zona Militar con sede en esta entidad, en la supuesta casa de seguridad había 102 mochilas con útiles escolares, así como 214 osos y otras figuras de peluche, 46 espadas de plástico, además de 99 bolsas con llaveros de figuras para niños.
La casa podría tener relación con los grupos que presuntamente organizaron protestas contra la presencia del Ejército y para convencer
a cientos de mujeres y jóvenes a unirse a las protestas les pagaron 500 pesos por persona, además de repartir mochilas con útiles escolares.
Al conmemorar el Día del Policía, José Natividad González Parás, gobernador del estado, dijo que muchos agentes piensan bien y actúan correctamente, y la mayoría tiene una historia decente, de solidaridad y de actitud de servicio a la comunidad
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Aldo Fasci Zuazua, secretario de Seguridad Pública, señaló que ya es tiempo de demostrar de qué estamos hechos, que tenemos corazón de policía, y urge señalar a los cobardes y hacerlos a un lado, sea quien sea
.
Expuso que por culpa de 60 malos elementos, que nos traicionaron y mancharon
al involucrarse con delincuentes el año pasado, la ciudadanía juzga mal a la mayoría de los agentes, aunque debe haber otros que andan en la senda del mal y es preciso denunciarlos.