La mayoría del PAN y del PRI en la Cámara de Diputados aprobó ayer la Ley Federal para el Control de Sustancias Químicas Susceptibles de Desvío para la Fabricación de Armas, a pesar de que la Comisión de Defensa advirtió que ceder al Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) la supervisión de las empresas que elaboran o importan precursores químicos le resta atribuciones a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

En tribuna, diputados del PRD alertaron que con la ley se pretende regularizar el nombramiento de Jesús Mao Cervantes (en el Cisen), quien –recordaron– es buscado por la Interpol por un fraude en Venezuela, y entregar la supervisión del manejo de sustancias a empresas privadas debido a que el Cisen no cuenta con una infraestructura especializada para ese propósito.

No es más que otro rufián buscado por la Interpol. Mao Cervantes trabajaba con Joaquín Arenal en la Administración Central de Investigación Aduanera cuando pasó lo del chino (Zhenli Ye Gon), y hoy son compañeros en el Cisen, que está infiltrado por delincuentes. Es tiempo de que se acaben las canalladas en el país y los negocios de los amigos de (Felipe) Calderón, a costa de la seguridad nacional, afirmó.

Sin embargo, con 258 votos a favor de panistas y priístas, así como de legisladores de Panal y PVEM, y 107 en contra de PRD, PT, Convergencia y Alternativa, así como cinco abstenciones –cuatro de los priístas Jericó Abramo, José Murat, Samuel Aguilar y Jesús Reyna–, se aprobó el dictamen de la Comisión de Gobernación, debido a la presión que ejerció sobre Emilio Gamboa el panista Héctor Larios.

Por la mañana, a una propuesta del coordinador del PRD, Javier González Garza, la Comisión de Defensa, que preside el general Jorge Justiniano González Betancourt, del PAN, aprobó por unanimidad un exhorto para que el dictamen no se votara, y en cambio se turnara a la Junta de Coordinación Política, con el propósito de construir un acuerdo para modificarlo.

No obstante, el presidente de la mesa directiva, César Duarte Jáquez, argumentó que durante el proceso legislativo de la minuta del Senado a la ley, la Comisión de Defensa no solicitó que se le turnara para dar una opinión y, por tanto, no era aceptable su exhorto.

Votado en lo general, los diputados Alfonso Suárez del Real y Valentina Batres presentaron una propuesta de modificación al artículo 2, fracción XVIII, para establecer que la autoridad nacional encargada de la supervisión y control de las empresas y el manejo de productos químicos fuera la Sedena, mediante la Dirección General del Registro Federal de Armas de Fuego y Control de Explosivos, pero la mayoría del PRI y PAN la rechazó.

Suárez del Real argumentó que, en sentido contrario a las atribuciones históricas de la Sedena en el manejo y control de armas, hoy se pretende que sea un órgano de investigación el que adquiera facultades administrativas para controlar y autorizar sustancias susceptibles a ser utilizadas en contra de la soberanía nacional y la población.

El Cisen, dijo, ha demostrado su ineficiencia y no ha podido prevenir acciones delictivas como –ejemplificó– la agresión armada al gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, o los robos contra la industria de explosivos, ni alertar sobre las manifestaciones de los embozados en Monterrey.

Batres afirmó que el Cisen le ha fallado a este país, porque quienes están a cargo no tienen la mínima idea de lo que significa trabajar para su patria.