El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, aseveró que en el sexenio pasado hubo omisiones respecto del combate al narcotráfico. Bajo ese parámetro dijo que antes de la administración calderonista el país vivió en una paz simulada, sin sustento.

El responsable de la política interna pidió ir más allá de la memoria de corto plazo, porque los problemas de inseguridad estaban soterrados en la sociedad desde hace mucho; es decir, advirtió, la violencia ya estaba implícita, la seguridad ya estaba perdida desde antes.

El problema de la inseguridad, de la amenaza del narcotráfico, de los secuestros, ya estaba latente, lo que pasa es que no habían sido enfrentados con fuerza para que salieran sus efectos más dramáticos a flote, expresó durante un diálogo con integrantes del Border Trade Alliance (Alianza para el Comercio Fronterizo) y más tarde en entrevista con reporteros. En toda oportunidad, el funcionario dejó en claro que la violencia en México ya estaba desde hace muchos años.

–¿Incluyendo al sexenio de Vicente Fox? –se le preguntó.

–Evidentemente hubo omisiones en el sexenio pasado.

–¿Omisiones que deben ser sancionadas desde los puntos de vista penal y administrativo o solamente en el político?

–Hasta donde yo entiendo, la política va poniendo a todos en su lugar. Del pasado tomemos lo que necesitamos para aprender; ¡hombre!, no nos quedemos anclados en eso. Todos tenemos que entrarle –respondió.

Durante su ponencia frente a los analistas de la mencionada alianza comercial, se refirió a los operativos encabezados por el Estado mexicano, especialmente en las zonas fronterizas.

Tras enumerar nuevos retos, como el incremento en el consumo de drogas y de tráfico de armas a ambos lados de la frontera norte, advirtió que el Estado mexicano no tiene otra alternativa ni moral ni política con la sociedad que dar la batalla contra los violentos.

“El sentimiento de impotencia frente a organizaciones criminales –agregó– no surgió de dos años a la fecha; ahora estamos generando el espacio para recuperar con cimientos sólidos y veraces la seguridad dando una lucha sin precedentes.”

Explicó que acabar con el dominio puesto por las redes criminales será un proceso largo y costoso. Poco a poco los logros se volverán más palpables y sus efectos más permanentes. Con certidumbre iremos proclamando nuestra victoria.

Para que no pase como en Irak

Gómez Mont encabezará este miércoles, en Ciudad Juárez, una reunión de integrantes del Consejo de Seguridad Nacional con las principales autoridades de Chihuahua, entidad en la que se ha registrado en los últimos dos años el mayor número de ejecuciones vinculadas con el crimen organizado. Los funcionarios prevén restructurar una vez más los operativos y, sobre todo, fortalecer a las corporaciones municipales y estatales, porque de lo contrario –dijo– al gobierno federal le pasaría como al de Estados Unidos cuando se quedó atrapado en Irak, ante la incapacidad de las autoridades de ese país para retomar el control.

“El Ejército Mexicano –comentó– está dando el margen histórico de maniobra para que el Estado federal, estatal y municipal (sic)” recupere el control.

Gómez Mont aseveró que el gobierno federal no ha dejado solo al gobierno de Chihuahua (encabezado por el priísta José Reyes Baeza). Para sustentar su afirmación enumeró la participación de fuerzas federales en esa entidad, entre las que destaca la movilización de poco más de 2 mil militares, 425 elementos de las Fuerzas Federales de Apoyo (PFP) y 71 agentes del Ministerio Público federal. En semanas recientes ha habido acusaciones mutuas, situación que el funcionario ubicó como obstáculos políticos que no han impedido –aun con empellones– alcanzar acuerdos.

Respecto de la situación en Chihuahua, el funcionario dijo no tener información acerca de un cambio de residencia del alcalde de Ciudad Juárez, a consecuencia de las amenazas de muerte de las que ha sido objeto. “No ha abandonado la plaza (…) Juárez no sólo es una plataforma para el narcotráfico”, expresó el funcionario.

Tras lamentar la situación que vive el edil de aquella ciudad dijo que él no ha recibido ese tipo de presiones, al tiempo que llamó a la sociedad a denunciar las extorsiones.