Pumas enfrenta el temporal y la andanada de críticas luego de cinco fechas sin triunfos. Veremos de qué estamos hechos, señaló Efraín Velarde, mientras Juan Francisco Palencia rindió el parte de las derrotas con una conclusión triste: Cuando anotamos goles, nos meten más, y cuando no marcamos, ¡también nos anotan!

Ambos, junto con el argentino Martín Bravo, recalcaron que el grupo está a muerte con el técnico Ricardo Ferretti, porque quienes se han equivocado en la cancha somos nosotros, admitieron. Asimismo, Velarde se alegró de que la revancha está en puerta, el miércoles en el estadio Azul, en su visita a La Máquina, dentro de la Concachampions.

El estratega, quien no dio declaraciones, hizo gala de su singular humor, al retirarse del estadio México 68 en su Mercedez Benz negro unos minutos después de la salida del directivo Mario Trejo. Lanzando risas y bromas, Ferretti se despidió haciendo caracolitos con la mano a los fotógrafos que se atravesaban afanados en tomarle fotos; No me tomen en el coche, ¡aquí no!, les gritó.

Los auriazules, al igual que la semana pasada, recordaron que en 2008 superaron otra mala racha de seis juegos sin ganar, y no es que nos estemos acostumbrando, de ninguna manera, sino ya sabemos que hay capacidad para salir adelante. Falta equilibrio entre defensiva y ofensiva, y nos hace falta la estabilidad de otros torneos, porque si adelante no anotamos y encima recibimos goles es porque hemos sido inestables, reiteró Palencia.

El argentino Martín Bravo fue uno de los jugadores que expresó su apoyo a Ricardo FerrettiFoto Cristina Rodríguez

El delantero negó que el plan-tel haya caído en el desánimo, por el contrario, indicó que la fórmula es trabajo, ocuparnos de la situación, buscar la manera... Existe incomodidad, pero no debemos presionarnos, sería peor; la meta es hacer que el trabajo de la semana se refleje en la cancha.

Dijo que están apenados con su numeroso público y no les queda otra que aceptar las críticas, es normal con los resultados que tenemos, pero la afición debe estar tranquila, en cada juego salimos a entregarnos y pronto vendrán los buenos resultados, agregó.

Velarde rechazó que los planes hayan rodado por el suelo. Es muy temprano para eso. Aún aspiramos a la liguilla, estamos a tiempo de corregir, faltan muchos partidos y, afortunadamente, está en nuestras manos. Es muy temprano para pensar que el equipo está perdido, quedan 10 jornadas, las cuales debemos jugar a muerte.

El Chispa Velarde se afanó en la defensa del Tuca: Él recibe los ataques, pero aquí ganamos y perdemos todos; en cada uno hay parte de responsabilidad y nosotros somos quienes jugamos. Tenemos que trabajar muy fuerte, no perder la confianza y apoyarnos para cambiar el rumbo, concluyó tras la práctica realizada en la cancha dos de Ciudad Universitaria.