■ Con apoyo policial querían revisar los archivos
Se reaviva el acoso a la revista Contralínea
Este miércoles se reavivó el acoso a la revista Contralínea. Policías capitalinos y representantes del Grupo Zeta Gas ingresaron cerca de las 15:20 horas a las instalaciones del referido medio con la intención de realizar una revisión a los libros contables y fiscales de la empresa.
En entrevista telefónica, la reportera Nancy Flores informó a La Jornada, al mismo tiempo en que se efectuaba el allanamiento, que agentes policiacos pretendían ingresar a la redacción sin mostrar algún escrito u orden de autoridad competente, por lo que trabajadores y reporteros de la revista colocaron vallas, con lo que pudieron, e impidieron que se concretara el allanamiento. “Son cerca de 25 elementos uniformados con escudos de una corporación denominada Protección Ciudadana Alameda y de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal; quieren ingresar con empleo de fuerza a nuestras oficinas. Nos están empujando y no nos muestran la orden judicial para que se pueda efectuar la diligencia”, puntualizó la periodista.
Por la noche, en un comunicado que fue leído en la conferencia de prensa encabezada por el periodista Miguel Badillo, director de Contralínea, agregó: “Los representantes de Grupo Zeta, que dirige Alonso Zaragoza, acudieron por segunda ocasión a las instalaciones de Contralínea.
“El abogado de la empresa gasera, Diego Romero Velasco, exigía ingresar a los escritorios y archiveros de los trabajadores y reporteros.
“Su proceder fue apoyado en todo momento por el actuario Juan Manuel Aguilar Maya; por Eduardo Yáñez, representante de la SSP-DF; por 25 policías de esa secretaría y cuatro guardaespaldas civiles”.
Los agentes policiacos se retiraron de las instalaciones de la revista a las 16 horas, luego de que no pudieron cumplir con su cometido.
Las embestidas judiciales que afectan al director y a la reportera Ana Lilia Pérez derivan de una serie de demandas y amenazas realizadas por el Grupo Zeta Gas.
Jesús Alonso Zaragoza López, accionista mayoritario de Zeta Gas, presentó las primeras demandas el 16 de agosto de 2007, por supuesto “daño moral”.