■ Afirma que el pueblo esperaba que el Congreso abordara los desafíos “que enfrentamos”
Califica Obama de positivo el avance en las negociaciones sobre el plan económico
■ Si se aprueba el paquete “será una jornada muy mala para Estados Unidos”, opina McCain
Washington, 7 de febrero. El presidente Barack Obama saludó este sábado el acuerdo alcanzado la noche del viernes por la mayoría demócrata en el Senado sobre un monto de 780 mil millónes de dólares del plan de rescate económico. Aunque las discusiones continuaron durante el fin de semana, se prevé que el proyecto sea votado entre el lunes y el martes.
“En el centro de nuestra mayor crisis económica desde la Gran Depresión, el pueblo estadunidense esperaba que el Congreso comenzara a abordar los inmensos desafíos que enfrentamos”, declaró el presidente de Estados Unidos durante su alocución radial semanal.
“La escala y la envergadura de este plan, es justa. Y es tiempo de actuar ahora”, destacó Obama, estimando que era “positivo” el progreso de las negociaciones en el Senado.
Los senadores demócratas anunciaron el viernes de noche un compromiso que reunía suficientes votos como para aprobar el plan de estímulo económico de al menos 780 mil millones de dólares.
Tras largas negociaciones, se llegó finalmente a un acuerdo para recortar los cerca de 920 mil millones de dólares inicialmente previstos, gracias al trabajo tras bambalinas de un pequeño grupo de legisladores “moderados” de ambos partidos.
Los demócratas cuentan con tres senadores republicanos –Olympia Snowe, Arlen Specter y Susan Collins– para poder aprobar el plan.
“Creo que debemos actuar”, explicó Specter, citado el sábado por The New York Times, “y dadas las circunstancias (este plan) es lo mejor que podemos hacer”.
Pero una gran parte de los senadores de la oposición republicana, comandados por el ex candidato presidencial, John McCain, sigue siendo hostil al plan que se discute desde hace una semana en el Senado y que, según el jefe de la mayoría demócrata, Harry Reid, podría ser aprobado el lunes. Si se aprueba, será “una jornada muy mala para Estados Unidos”, opinó McCain.
Cosa poco habitual en el Senado, los debates se reanudaron el sábado al mediodía sobre la base de las enmiendas presentadas por los republicanos, que sin embargo tienen pocas posibilidades de ser aprobadas. El texto no será discutido el domingo y los debates proseguirán el lunes. Se prevé que la votación tenga lugar entre la noche del lunes o durante el transcurso del martes.
Entre los principales recortes del plan, hay que señalar la supresión de 40 mil millones destinados a ayudar a los estados con sus gastos, sobre todo el financimiento de la educación. Esas reducciones no gustan a todos los demócratas, pero la Casa Blanca, por intermedio de su secretario general, Rahm Emanuel, dio su aceptación.
El nuevo plan de rescate incluiría algún mecanismo para incitar a los inversionistas privados a comprar los activos dudosos de los bancos, que recibirían una nueva inyección de capitales públicos, escribe el sábado la prensa estadunidense.
El Estado parece así haber renunciado a nacionalizar los bancos y a crear una estructura pública encargada de comprar los activos invendibles de los bancos desde la crisis de los créditos inmobiliarios de alto riesgo de mediados de 2007, según informaciones de The Wall Street Journal y The New York Times.
“Si no avanzamos rápidamente para aplicar este plan, nuestra crisis económica podría convertirse en una catástrofe nacional”, justificó Obama.
Una primera versión del plan, de un monto de 819 mil millones de dólares, fue aprobada a finales de enero por la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes con el voto en contra de todos los republicanos.
Si el Senado aprueba finalmente el texto, deberá ser conciliado con el ya aprobado por la Cámara de Representantes y al final remitido a ambas cámaras.