■ Cien países expresan en Madrid preocupación por la “inaceptable inseguridad alimentaria”

Sin acuerdos, cumbre para paliar el hambre a mil millones en el mundo

■ Sólo España se comprometió a destinar mil millones de euros adicionales al fondo internacional para reducir la pobreza

■ La historia nos juzgará por la respuesta que demos ante el flagelo: ONU

Dpa

Madrid, 27 de enero. La cumbre sobre seguridad alimentaria fue clausurada este martes por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, sin que se llegara a medidas concretas en la lucha contra el hambre en el mundo.

En su edición on line, el diario El País dio a conocer que 15 naciones tienen el compromiso de destinar 5 mil 500 millones de dólares para mitigar el problema –en los próximos cinco años–, que se unen a los mil 300 millones que ya moviliza la Unión Europea (UE). Sin embargo, en la reunión de dos días, sólo España –de un centenar de participantes– se comprometió a dar más dinero.

Zapatero anunció que destinará mil millones de euros para reducir la pobreza y el hambre en el mundo y garantizar la seguridad alimentaria. Se trata de una ayuda anual de 200 millones durante cinco años para los países más vulnerables, que se unen a los 500 millones comprometidos el pasado junio, durante la cumbre de la FAO realizada en Roma.

La Reunión de Alto Nivel sobre Seguridad Alimentaria para Todos fue continuación de aquel encuentro en la capital italiana.

“Es imprescindible que trabajemos mucho más” para luchar contra el hambre en el mundo, instó el secretario general de la ONU. “Tenemos la riqueza y los conocimientos para ello. Hagamos el máximo esfuerzo para mantener el hambre en el centro de los objetivos políticos. La historia nos juzgará por la respuesta que demos”, indicó.

“Hemos venido a asegurar una alimentación entre todos y para todos, para hoy y para mañana”, manifestó Zapatero. Consideró que la cifra de mil millones de personas que pasan hambre en el mundo “debería causar sonrojo a toda la humanidad”. Anunció que la lucha contra ese flagelo será “la gran prioridad” de la presidencia española de la UE en 2010.

La crisis económica internacional agrava la tragedia alimentaria en el mundo y, según el titular de la ONU, hace que miles de familias que habían comenzado a salir de la miseria vuelvan a caer en ella.

En el encuentro se aprobó la Declaración de Madrid, documento en el que los países participantes expresan preocupación por la “inaceptable” inseguridad alimentaria global e instan a “redoblar los esfuerzos por alcanzar los compromisos internacionales de incrementar sustancialmente los recursos financieros y la ayuda oficial al desarrollo, en particular la relacionada con nutrición, alimentación, agricultura y programas contra el hambre”.

No obstante, la declaración no expresa un compromiso claro para considerar básico el derecho a la alimentación, sólo anima a que se haga así. En el texto se acuerda adoptar un proceso para la creación de una alianza global contra el hambre, en la que tengan cabida tanto organizaciones de agricultores y de la sociedad civil como el sector privado y los gobiernos de naciones pobres.