■ Sus artrópodos invaden Chapultepec
Francisco Toledo, puente entre la ciencia y el arte
■ Exhibición en el Museo de Historia Natural
Ampliar la imagen Una de las criaturas que habitan Bestiario de artrópodos y una zoología variada, exposición del pintor juchiteco Francisco Toledo
Chapulines, saltamontes, grillos, libélulas, caballitos del diablo, chinches, cigarras, chicharras, pulgones, escarabajos, mayates, avispas, abejas, hormigas, moscas, mosquitos, pulgas, mariposas, alacranes, vinagrillos, arañas y tarántulas.
Esas son las criaturas que habitan Bestiario de artrópodos y una zoología variada, exposición del pintor juchiteco Francisco Toledo abierta el jueves 4 en el Museo de Historia Natural y de Cultura Ambiental, ubicado en la segunda sección del Bosque de Chapultepec, dentro de los festejos por las dos décadas del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, fundado por el artista.
La exhibición comprende 61 obras de Toledo, algunas de las que fueron realizadas ex profeso, propiedad de las galerías Juan Martín, Quetzalli y Arte Mexicano; un conjunto de estampillas con el tema de los insectos perteneciente a la colección internacional de timbres del Museo de la Filatelia (Mufi) de Oaxaca, y una gama de especies de la colección nacional que resguarda el Museo de Historia Natural.
Una primera versión de la muestra se exhibió primero en el Mufi, pero al llegar al Museo de Historia Natural se modificó y creció. Graciela Toledo, curadora de Bestiario... con Patricia Álvarez, explica que en la de Oaxaca había “originales y gráficas”, pero para su exhibición en México se dejaron sólo las obras originales.
Luego, el artista hizo 19 piezas más, entre pasteles con mica, tres óleos sobre tela y tres óleos sobre madera, dos de los cuales tienen grafito. Hay obra de 1996, 2006, 2007 y 2008. En 1997 Toledo presentó la exposición Insectario en el Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca.
Mari Carmen Toscano, subdirectora del Museo de Historia Natural, explica que a lo largo del año el recinto, cuyo titular es Eduardo Vázquez, ha realizado una serie de exposiciones en donde se pretende vincular ciencia y arte en un discurso común. Y, “¡qué mejor que los insectos para un museo de historia natural mediante la mirada del artista!”
Fuente de inspiración
Si los artrópodos han sido fuente de inspiración de las artes en las diferentes culturas, Francisco Toledo tampoco se ha escapado de esa atracción atávica. En su obra “los insectos van dejando huellas como si se tratara de fósiles de papel y tinta: el aleteo de las moscas que es danza, rehilete y fuga; el vuelo nervioso de las avispas; la trama delicada que dejan las patas de las pulgas en torno a la tibia sangre.
“Moscos patones que tropiezan en estridentes zumbidos; chapulines prestos a dar el brinco, migrantes de antenas aguzadas; escarabajos de férreas armaduras, tímidas libélulas cuyo perfecto diseño nos recuerda que fueron justamente sus antepasados los primeros seres vivos sobre la tierra que emprendieron la aventura del vuelo”, se puede leer en las cédulas de la sala.
Esta integración, anota Toscano, también es parte del “proyecto del nuevo Museo de Historia Natural”, que se construirá con miras al 2010. En la actualidad se trabaja en el proyecto ejecutivo.