■ Hasta ahora sólo Washington se opone a la reintegración, afirma el presidente boliviano
Evo Morales, por el retorno de Cuba a OEA o una nueva organización sin EU
■ Denuncia la presencia en la UE de maniobras para fragmentar los mecanismos integradores andinos
■ Acusa el mandatario a algunos países de Europa de aspirar a una “recolonización” de Latinoamérica
Ampliar la imagen El gobernante boliviano, ayer durante una conferencia de prensa realizada en el Palacio Quemado de la ciudad de La Paz Foto: Ap
Ampliar la imagen Manifestación contra Morales frente a la sede de la Organización de Estados Americanos en la capital de Estados Unidos Foto: Ap
La Paz, 22 de noviembre. El presidente de Bolivia, Evo Morales, planteó hoy el retorno de Cuba a la Organización de Estados Americanos (OEA) o, de lo contrario, la creación de un nuevo organismo sin la presencia estadunidense. “Queremos un organismo en que estén todas las naciones legalmente constituidas que conformamos el continente”, aseveró el gobernante, pues estimó que hasta ahora sólo Washington se opone en la región.
El mandatario, el primero de origen indígena en el país altiplánico, también denunció la existencia en la Unión Europea (UE) de maniobras tendientes a fragmentar los mecanismos integradores de la región andina.
Señaló que no es posible que en este nuevo siglo, en este milenio, algunos países europeos pretendan dividir para reinar, y los acusó de pretender una “recolonización de Latinoamérica”.
Fuerte aliado del líder cubano Fidel Castro y del presidente venezolano Hugo Chávez, Morales puntualizó que lanzaba la propuesta en procura de “una gran integración” y de cara a un previsible debate sobre la OEA en una cumbre latinoamericana prevista para diciembre próximo en Brasil.
“Quiero pedir a la OEA, a todos los países que la conforman, incluso Estados Unidos, que deben hacer una convocatoria para que Cuba vuelva a la OEA; no puede haber una OEA sin Cuba”, dijo.
Sugirió que en el curso de una “reunión de casi todos los presidentes de América Latina y el Caribe –en diciembre–, donde no está convocado, por supuesto, el país del norte, es posible que surja una nueva OEA sin Estados Unidos”.
Afirmó el mandatario que formuló su planteamiento “en consulta con algunos países evidentemente importantes”, que no mencionó, pero en cuyos intercambios no incluye a Cuba.
“Si no se convoca (al retorno de Cuba), si no vuelve Cuba mi propuesta es que hay que hacer otra OEA sin Estados Unidos, o algunos países nos vamos a ver obligados a impulsar otra OEA sin Estados Unidos”, señaló.
En rueda de prensa agregó que entre los países americanos sólo Estados Unidos se opone al retorno de Cuba al organismo continental, por lo que llamó a Washington a revisar su posición en favor de la integración continental.
Cuba fue expulsada de la OEA en 1962, tres años después del advenimiento de la revolución encabezada por Fidel Castro y cuando las relaciones internacionales estaban marcadas por la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética, pero son “tiempos pasados”, dijo Morales desde el presidencial Palacio Quemado.
La expulsión de Cuba se produjo a instancias de Washington con el voto de 14 países, uno en contra y las abstenciones de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador y México, en tanto que este último país fue el único en la región que mantuvo sus lazos con La Habana. En la actualidad la OEA tiene 34 estados afiliados.
El gobernante boliviano, que recientemente expulsó al embajador estadunidense en La Paz por “injerencia en los asuntos internos” y estar alentando una conspiración de la oposición de derecha contra su gobierno, y que puso fin a las actividades de la agencia antidrogas DEA en su país, insistió en que su propuesta se encamina a “unir a todas las naciones” en el organismo regional.
Por tanto, Morales aclaró que no estaba hablando de abandonar la OEA, sino de “hacer otra sin Estados Unidos” si es preciso.
Apuntó que “se puede respetar la diversidad, pero no se puede respetar la exclusión, el marginamiento”, en alusión al bloqueo económico y comercial impuesto por Estados Unidos a la isla.
En esa línea, el presidente boliviano indicó que “inclusive países de Centroamérica y el Caribe se dan cuenta perfectamente de que seguir los lineamientos de un modelo económico que no resuelve los problemas económicos obliga a pensar en otras formas de integración, y aquí estoy hablando de una integración plena de los países de América”.
Morales habló también sobre las dificultades que enfrenta la Comunidad Andina de Naciones (CAN) para negociar un acuerdo comercial con la UE, y señaló que espera que se concrete una reunión de los cuatro presidentes del bloque sudamericano con la cúpula política de la Unión Europea.
Por ello, criticó que el organismo europeo estimule acuerdos comerciales bilaterales con algunos miembros del CAN como Perú y Colombia, en vez de promover negociaciones de bloque a bloque.
El presidente dijo que ese encuentro sería importante para bloquear iniciativas de algunos ejecutivos de la UE que buscan acelerar acuerdos de libre comercio con esos dos miembros de la CAN, pese a las objeciones de los otros dos, Bolivia y Ecuador.
“Lamento muchísimo que algunos miembros de la Unión Europea traten de dividir a la región andina, no es posible que miembros de la Comisión Europea, en este nuevo siglo, nuevo milenio, busquen dividir”, protestó.
Además, anunció que asistirá el próximo miércoles a Caracas a una cumbre de la Alternativa Boliviariana de las Américas, el bloque antineoliberal latinoamericano liderado por Venezuela.
Esa reunión seguirá al Foro de Cooperación Asia Pacífico, que se realiza este fin de semana en Lima, al que calificó de “reunión de telecistas” o defensores de los tratados de libre comercio.
El ministro boliviano de Gobierno, Alfredo Rada, anunció por su parte el fin del estado de sitio en el departamento amazónico de Pando, norte de Bolivia, a partir de este domingo, cuya medida había sido establecida desde el pasado 12 de septiembre después de los episodios de violencia en cinco regiones opuestas al proyecto gubernamental de nueva Constitución.
Tras señalar que quedarán restituidas todas las garantías ciudadanas y constitucionales, ratificó que la máxima autoridad de esa región, Leopoldo Fernández, continuará detenido en la cárcel de La Paz, a quien se responsabiliza por los sucesos de violencia que dejaron unos 18 muertos en Porvenir y Cobija, poblaciones de Pando.
En esos hechos, unas 19 personas fueron implicadas y deberán ser procesadas por la justicia ordinaria, junto con Fernández.