■ Continúan los levantones y las ejecuciones pese a la presencia de militares y policías
Replantea el gobierno Operativo Chihuahua
En las próximas semanas el gobierno federal replanteará el Operativo Chihuahua, luego que el despliegue de más de 3 mil 500 soldados y 2 mil agentes federales no ha funcionado y la cantidad de personas ejecutadas aumentó de 140 en todo 2007 a mil 450 en los pasados once meses, aseguraron fuentes oficiales.
De acuerdo con los funcionarios consultados, representantes del gobierno de Chihuahua han exigido, en semanas recientes, a autoridades de las secretarías de Gobernación y de Seguridad Pública federal, así como de la Procuraduría General de la República (PGR), que mejoren sus resultados en la detección de grupos del crimen organizado, pues continúan los levantones y ejecuciones en contra, inclusive, de menores de edad y mujeres.
Hasta el momento, la puesta en marcha de acciones concentradas en los municipios de Chihuahua, Janos, Buenaventura, Ojinaga, Asunción, Casas Grandes y Nuevo Casas Grandes, no ha impedido que grupos de sicarios se desplacen por toda la entidad o bien se trasladen por la zona serrana hasta Sinaloa o Durango, reconocieron los informantes.
Vigilancia en caminos rurales
La intención del gobierno federal es que parte de la fuerza que se concentra en la llamada Operación Triángulo Dorado, que incluye a unos 10 mil soldados y 2 mil agentes federales en Chihuahua, Sinaloa y Durango, se concentre más hacia Ciudad Juárez y la capital chihuahuense.
También se está replanteando el esquema de inteligencia militar y civil en la zona, debido a que Chihuahua cuenta con más de 200 caminos rurales por los cuales narcotraficantes cruzan hacia Estados Unidos y por donde también mueven cargas de armamento y dinero ilícito.
Se debe recordar que no es la primera ocasión en que se planea modificar la estrategia gubernamental en contra del crimen organizado en Chihuahua, entidad que es base de operaciones del cártel de Juárez, cuya dominio ha entrado en disputa con el grupo que dirigen Ismael El Mayo Zambada y Joaquín El Chapo Guzmán.
Desde marzo, el entonces secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, había informado que se pondría en marcha una operación conjunta exclusiva para el estado de Chihuahua. En ese mismo mes se enviaron poco más de 2 mil militares y 400 policías federales.
En aquella ocasión, Mouriño declaró: “confiamos en que con este operativo se logren resultados positivos que puedan transformar y regresar la seguridad a los chihuahuenses, que el crimen organizado les arrancó a raíz de las acciones que el gobierno federal emprende en su contra”.
Días más tarde, tres aviones C-130 Hércules y un avión Boeing 727, de la Sedena transportaron a los efectivos militares a Ciudad Juárez. A ocho meses de aquel replanteamiento, la violencia en la entidad se refleja en las estadísticas nacionales en cuanto al número de ejecutados por el crimen organizado, y señalan que Chihuahua es el estado que mayor índice de este tipo de crímenes registra, y de acuerdo con las fuentes consultadas, se volverán a replantear las acciones contra los grupos de la delincuencia organizada.