■ Hillary Clinton y Bill Richardson suenan fuerte para el puesto de secretario de Estado
Ex asesores de figuras del Partido Demócrata se suman al equipo de transición de Obama
■ El futuro presidente renuncia al Senado; ya no podrá usar su blackberry por razones de seguridad
Ampliar la imagen El presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, y su esposa, Michelle, durante la entrevista con el reportero Steve Kroft para el programa 60 Minutos de la cadena CBS, el pasado viernes Foto: Ap
Chicago, 16 de noviembre. El presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, volvió a echar mano de ex asesores de figuras políticas del Partido Demócrata para incorporarlos al equipo de trabajo que le acompañará de aquí a la toma de posesión el 20 enero próximo.
Los nombramientos continuaron este domingo mientras que la prensa estadunidense dio a conocer que Obama tendrá que renunciar al uso de su minicomputadora portátil blackberry, que constantemente consultaba durante su campaña electoral para leer sus correos electrónicos.
Expertos en asuntos legales y de seguridad afirman que de esa manera el Congreso no tendría razones para exigir que haga públicas sus comunicaciones por esa vía y tampoco podrían ser detectados sus movimientos y su ubicación por terceras personas. Ni George W. Bush ni Bill Clinton tuvieron cuentas de correo electrónico.
En un comunicado la oficina del presidente electo, Pete Rouse, quien trabajó 19 años para el ex líder demócrata en el Senado, Tom Daschle, fue designado asesor de alto rango de Obama en la Casa Blanca, tras haber dirigido el grupo de asesores del afroestadunidense durante su gestión en la Cámara Alta.
En círculos políticos se dice que Daschle, quien fue uno de los consejeros de Obama en la campaña electoral, también ocupará un alto cargo en el próximo gobierno.
Una funcionaria que formó parte del Consejo de Seguridad Nacional durante la presidencia de Bill Clinton, se desempeñará como subjefa del gabinete que encabezará Rahm Emanuel.
Otro de los nombramientos en el equipo de Obama recayó en Jim Messina, un analista que tiene amplia experiencia en la asesoría legislativa.
De acuerdo con la edición en Internet del Washington Post, el abogado Greg Criag, que se encargó de la defensa de Bill Clinton en el proceso que intentó llevarlo a juicio político en 1998, será consejero legal de Obama en la Presidencia.
Obama, quien confirmó hoy que cerrará la cárcel de Guantánamo, anunció su renuncia al Senado –al cual llegó en 2004– para concentrarse en las actividades encaminadas a la recepción del gobierno, mientras que en los medios de información estadunidenses continúa la especulación sobre quiénes podrían asumir las carteras del gabinete.
El puesto de secretario de Estado es uno de los que atrae más atención. A la fecha se manejan principalmente los nombres de la senadora por Nueva York y ex contendiente de Obama por la candidatura demócrata, Hillary Clinton; el ex representante y ex gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, quien además estuvo a cargo de la misión estadunidense ante la Organización de Naciones Unidas; y el ex candidato presidencial demócrata en 2004, el senador por Massachusetts, John Kerry.
El viernes pasado fuentes cercanas a Obama revelaron que Hillary Clinton y Richardson sostuvieron entrevistas privadas con el presidente electo para tratar la posibilidad de asumir la jefatura de la diplomacia estadunidense.
Según CNN, el mandatario electo dijo a la senadora que el puesto es para ella “si lo quiere”. Clinton, que peleó hasta el final por la candidatura presidencial demócrata, es señalada en los medios de información como una de las próximas figuras del gabinete.
Aunque la senadora ha realizado actividades más vinculadas a la política interior, destaca en su curriculum el hecho de formar parte del comité de las fuerzas armadas de la Cámara Alta, que le vincula directamente con asuntos de política exterior, como las guerras de Irak y Afganistán. Además, como ex primera dama y legisladora ha visitado 81 países.
Richardson ha brillado como negociador en el extranjero y uno de los principales puntos a su favor es que en 1994 logró la liberación de un soldado estadunidense que ingresó por error al espacio aéreo norcoreano, por lo que fue derribado y capturado.
Por lo que toca a Kerry, es relevante su participación en el comité de política exterior del Senado durante 19 años, pero su nombre es menos citado que el de Clinton y Richardson.