■ Se conmemora el 19 aniversario del asesinato del rector de la UCA y 7 personas más
Acusar a Cristiani por la matanza de jesuitas no ayuda a la reconciliación: arzobispo salvadoreño
■ Desaprueba el prelado abrir un proceso judicial en España como piden grupos humanitarios
Ampliar la imagen Salvadoreños recuerdan los asesinatos del rector de la UCA, otros cinco jesuitas y dos mujeres hace 19 años por elementos del ejército durante la guerra civil que duró 12 años en la nación centroamericana Foto: Ap
San Salvador, 16 de noviembre. Al cumplirse 19 años del asesinato del rector de la Universidad Centroamericana Simeón Cañas (UCA), Ignacio Ellacuría y otros cinco jesuitas, así como dos mujeres, el arzobispo de esta capital, Fernando Sáenz, consideró que las acusaciones contra el ex presidente salvadoreño Alfredo Cristiani por su supuesta participación en la matanza, no ayudarán a la “reconciliación” en el país centroamericano.
La madrugada del 16 de noviembre de 1989, integrantes de un comando de elite del ejército salvadoreño irrumpieron en la UCA y ejecutaron al rector de la institución educativa, el intelectual Ignacio Ellacurría, quien había señalado las injusticias sociales como fuente de todos los males que sufría El Salvador.
Esa misma noche, en plena ofensiva del entonces guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FLMN), también mataron al vicerrector Ignacio Martín Baró y a los sacerdotes españoles Segundo Montes, Amando López y Juan Ramón Moreno, así como al cura salvadoreño Joaquín López, la empleada doméstica Elba Ramos y su hija Celina, para no dejar testigos del crimen.
La ejecución de Ellacurría y los otros jesuitas provocó conmoción en el mundo entero por la saña con que fueron ultimados los religiosos, todos ellos con el tiro de gracia y arrastrados después hacia los jardines de la universidad.
Durante semanas el gobierno salvadoreño trató de encubrir al ejército por su participación en la matanza, al tiempo que responsabilizaba a los guerrilleros, hasta que las investigaciones posteriores hicieron insostenible su versión y en enero de 1990 admitió que las fuerzas armadas estaban involucradas.
“Temo que el abrir este caso en los tribunales de otro país no nos ayudará en el proceso de reconciliación interno”, afirmó Sáenz, en referencia a la demanda que presentaron dos organizaciones de defensa de derechos humanos ante la justicia española, para juzgar a Cristiani y a 14 militares salvadoreños por el asesinato de los jesuitas.
Según el religioso, Alfredo Cristiani desempeñó un papel clave para lograr el acuerdo de paz firmado el 16 de enero de 1992 en la ciudad de México, que puso fin a una guerra civil de 12 años que dejó más de 75 mil muertos y miles de desaparecidos.
Al conmemorar hoy el aniversario 19 de la matanza, Sáenz señaló que la “muerte martirial” de los jesuitas formó parte de los “muchos casos de injusticias y crímenes de la pasada guerra cometidos por ambos lados (el ejército y la guerrilla).”
De esta manera el arzobispo dijo compartir la posición del rector de la UCA, José María Tojeira, quien prefirió no sumarse a la demanda judicial en España, a la espera de que la justicia salvadoreña se haga cargo de este asunto.
Por este crimen fueron juzgados en septiembre de 1991 14 militares, pero sólo dos de ellos fueron encontrados culpables: el director de la Escuela Militar de El Salvador, Guillermo Alfredo Benavides, y el teniente Yussy Mendoza, quienes fueron condenados a 30 años de cárcel.
Sin embargo, ambos salieron de prisión el primero de abril de 1993 gracias a la ley de amnistía decretada por el Congreso salvadoreño, que perdonaba todas las atrocidades cometidas en la guerra civil.
La controversia desatada por la denuncia contra Cristiani sucede en plena campaña con miras a las elecciones presidenciales del 18 de enero de 2009, en las que el candidato del FMLN, Mauricio Funes, aparece como favorito en diversas encuestas, lo que pondría fin a 20 años en el poder de la ultraderechista derechista Alianza Republicana Nacionalista.