■ Exigen ser escuchados y tomados en cuenta en las decisiones sobre su instrumentación
Rechazan secretarios de Educación dar apoyo incondicional a la ACE
■ “Estamos de acuerdo con la demanda de calidad, pero no con los mecanismos para aplicarla”, dicen
Ampliar la imagen La presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo, en imagen de archivo Foto: Marco Peláez
Tijuana, BC, 1º de noviembre. A menos de seis meses de la puesta en marcha de la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), autoridades educativas estatales demandaron a la Secretaría de Educación Pública (SEP) no recibir un trato de “enemigos”, en un nuevo desencuentro con la titular del ramo, Josefina Vázquez Mota, a quien exigieron ser “escuchados y tomados en cuenta” en las decisiones para aplicar el acuerdo.
Al concluir la 14 sesión plenaria del Consejo de Autoridades Educativas (Conaedu), que se realizó ayer en esta ciudad, afirmaron que en la instrumentación del acuerdo la SEP “nos quiere ver como si fuéramos sus 32 enemigos, y no es así. Ni siquiera estamos haciendo grilla”, y condicionaron su “apoyo total” a la alianza a que se realice una evaluación a fondo de sus resultados y alcances.
“Estamos desconcertados. Queremos que nos escuchen, participar en la toma de decisiones, porque nunca se ha querido regionalizar la alianza, y se les olvidó que tenemos 1.2 millones de maestros con la piel muy sensible”, advirtieron secretarios de Educación estatales, quienes prefirieron guardar el anonimato.
Recordaron que el llamado al diálogo con la SEP “lo hicimos desde el encuentro de Conaedu en septiembre pasado. Inclusive se nos dijo que como éramos muchos convocarían a reuniones regionales, pero no hubo resultados, porque estamos en las mismas, no nos escuchan”.
Tras rechazar, en la sesión de trabajo, suscribir un punto de acuerdo para garantizar el aval “incondicional” al pacto educativo firmado el pasado 15 de mayo por Elba Esther Gordillo Morales, líder del gremio magisterial, y el presidente Felipe Calderón Hinojosa, aseguraron que “estamos de acuerdo con la demanda de calidad para el sistema educativo, pero no con las formas y los mecanismos para imponer el acuerdo”.
Ante la presencia de Vázquez Mota, los responsables estatales se negaron a suscribir un punto de acuerdo propuesto por el secretario de Educación de Baja California, José Óscar Vega Marín, quien presentó la iniciativa por escrito para avalar la alianza de forma “incondicional”, lo que abrió un acalorado debate que se prolongó por más de una hora.
Autoridades educativas del norte del país demandaron frenar “toda simulación” y evitar que dichos encuentros se conviertan en “sesiones de levantadedos”, por lo que insistieron en revisar a fondo la aplicación de la alianza, y subrayaron que no es posible avalar el acuerdo “sin ninguna condición, si no sabemos ni cómo va; así que primero evaluamos y luego decidimos”.
Después de diversas intervenciones en contra del punto de acuerdo, el pleno de la Conaedu sólo aprobó ratificar los objetivos de la alianza y celebrar una reunión para evaluar sus mecanismos a solicitud de los secretarios de Educación de 23 estados, y de los subsecretarios de Educación de Tamaulipas, Querétaro, Puebla, Hidalgo, Guerrero, Baja California Sur, Coahuila y Aguascalientes.
Conaedu no es un frontón: secretarios
Secretarios de Educación de diversos estados también demandaron que las sesiones plenarias de la Conaedu “no queden como reuniones donde venimos a escuchar informes de los subsecretarios, sino como espacios de debate donde se nos tome en cuenta, porque esto no es un frontón, donde la pelota va de un solo lado. Un diálogo es de dos, y en ambas direcciones”.
Ante el rechazo total a la ACE en Michoacán y Oaxaca, al que se sumaron Morelos, Puebla, Guerrero y Zacatecas, estados como Chihuahua, Querétaro, Quintana Roo, Campeche, Veracruz, Chiapas y Coahuila, donde hay “claras muestras de inconformidad”, advirtieron que “hay conflictos que se administran, y otros que se resuelven, y los temas educativos se resuelven. El caso de Morelos dejó muy claro que se debe respetar más la dignidad del magisterio”, concluyeron.