■ El canciller cubano firmará acuerdos en materia de migración
Con México se restableció el diálogo político: Pérez Roque
Ampliar la imagen El canciller Felipe Pérez Roque, a su llegada a la ciudad de México, es recibido por el embajador cubano Manuel Aguilera de la Paz Foto: Jesús Villaseca
Las relaciones entre México y Cuba ya se normalizaron, se restablecieron el diálogo político entre ambas naciones y el funcionamiento de los mecanismos bilaterales, e incluso ambos gobiernos firmarán un acuerdo de cooperación que permitirá prevenir y frenar la migración indocumentada, el tráfico de personas y los delitos asociados a esta práctica, señaló el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque.
A su llegada ayer al país procedente de La Habana, el canciller cubano fue entrevistado en el aeropuerto capitalino, y ahí sostuvo que ya quedó atrás el periodo de estancamiento de las relaciones entre estos países, y puntualizó: “estamos retomando el camino que nunca debió perderse, estamos reconstruyendo lo que fue gravemente afectado en el pasado”.
Invitado por el gobierno de México, Pérez Roque adelantó que incluso en su visita se podrían firmar algunos acuerdos de cooperación económica, ya que la relación entre ambos países está adquiriendo una “dinámica nueva”.
También confirmó ser el portador de una invitación oficial para que el presidente Felipe Calderón visite la isla próximamente, y al preguntarle cuándo se podría concretar este viaje comentó que quizá se pudiera llevar a cabo el próximo año.
Acompañado por el embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera, y otros miembros del cuerpo diplomático de La Habana, Pérez Roque accedió a platicar con la prensa, que lo esperaba desde muy temprano, y remarcó: “puedo confirmar que las relaciones hoy entre nuestros países son normales y progresan de manera continua; se han restablecido el diálogo político, el funcionamiento de los mecanismos bilaterales de diálogo y cooperación, y hemos alcanzado importantes entendimientos en el terreno de la cooperación migratoria”.
Respecto del acuerdo que se firmará en esta materia, explicó que los dos gobiernos han tenido cuatro sesiones de trabajo en las que se logró concretar un entendimiento que “implicará, por un lado, hacer más fácil la migración y viajes legales, y fortalecer la capacidad de los ciudadanos de un país de viajar a la otra parte. Por otro, nos permite trabajar para prevenir y enfrentar la migración ilegal, el tráfico de personas y los delitos asociados a esta práctica”.
Cuba, dijo, ha estado sometida, además de a un férreo bloqueo económico, a una política de estímulo a la emigración indocumentada auspiciada por Estados Unidos. “Hemos sido víctimas de toda esa política… y México se ha convertido en un país de tránsito (de cubanos)”. Por ello las medidas que se han acordado contemplan un mecanismo expedito para la devolución de los emigrantes sin papeles que intenten utilizar a México para atravesar hacia el norte.
Además se establecen también mecanismos de cooperación entre instancias especializadas de ambos países, como son entre la Marina mexicana y las tropas guardafronteras cubanas para garantizar que el flujo migratorio sea legal, seguro y ordenado, que es el objetivo de ambas partes, apuntó Pérez Roque.
Según planteó, el objetivo es que todo el que emigre lo pueda hacer de manera legal y segura, sin poner el peligro su vida en embarcaciones que operan de manera ilícita, sometiéndose a traficantes de personas, y en viajes que continuamente tienen accidentes, en los cuales mueren tanto adultos como niños, y eso se utiliza como materia de propaganda política contra Cuba, desde Estados Unidos. Por ello hay que cambiar toda esa realidad, y ambos gobiernos van a trabajar para evitar que eso siga ocurriendo, comentó.
Pérez Roque aseguró que el gobierno cubano mantiene su disposición a desarrollar las relaciones bilaterales sobre la base del diálogo, el respeto a la igualdad soberana de los estados a la no injerencia en los asuntos internos.
Durante su visita, el diplomático llevará a cabo la firma de los acuerdos alcanzados, en un encuentro con la canciller mexicana; se reunirá con el presidente Felipe Calderón, los líderes de diversos partidos políticos, así como legisladores, además de que será declarado huésped distinguido por el gobierno capitalino.