■ El premier Maliki pide a GB retirar tropas; ya no se requieren para dar certidumbre, dice
Jefe militar de EU acusa a Irán de pretender boicotear un acuerdo de seguridad en Irak
■ En Afganistán, fuerzas internacionales y el ejército local aseguran haber abatido a 14 talibanes
Ampliar la imagen Iraquíes conducen el ataúd de un hombre fallecido en su casa durante un bombazo en Badgad. El estallido del artefacto, sembrado en un auto estacionado, causó la muerte de nueve personas y dejó heridas a 13 en el distrito de Bayaa, al sur de esa capital Foto: Reuters
Washington, 13 de octubre. El jefe de las fuerzas internacionales en Irak, Raymond Odierno, afirmó que Irán busca sobornar a los legisladores iraquíes para hacer fracasar un acuerdo de seguridad y que las tropas estadunidenses sigan en Irak en 2009, informó el diario The Washington Post.
Según el militar, el gobierno iraní trabaja de forma tanto pública como encubierta para boicotear un acuerdo de seguridad en Irak, y aunque admitió no tener pruebas de sus acusaciones, dijo que diversos informes de inteligencia confirman sus dichos.
Las negociaciones sobre la permanencia de los soldados estadunidenses comenzaron en febrero de este año y debieron concluir en julio, pero temas como el calendario de retiro de las tropas ocupantes y la inmunidad de los militares y civiles estadunidenses –muchos de ellos señalados como mercenarios– entramparon las conversaciones.
En este contexto, el primer ministro iraquí Nuri Maliki afirmó en entrevista publicada por el diario británico The Times que la presencia de las tropas británicas en Irak ya no es necesaria para garantizar la seguridad, y por lo tanto deben volver a su país.
El premier iraquí aprovechó para criticar al ejército británico por haber retirado a sus tropas de la ciudad de Basora (sur) en diciembre pasado, para entregar la estafeta a los soldados iraquíes e instalarse a las afueras del aeropuerto, en una decisión que consideró “sumamente” prematura.
Maliki también reprobó las negociaciones de los militares británicos con los rebeldes del Ejército del Mehdi, grupo armado del clérigo chiíta Moqtada Sadr, para que éstos cesaran sus ataques.
En el terreno, la espiral de violencia continuó con el asesinato de dos cristianos en la norteña ciudad de Mosul, donde más de mil 300 familias de esa religión se han visto obligadas a huir, por las amenazas de grupos no identificados. En días recientes han sido asesinados entre 5 y 14 cristianos en Mosul, alertó dicha comunidad.
Mientras tanto, en el frente de guerra de Afganistán, las tropas internacionales y el ejército local aseguraron haber abatido a 14 guerrilleros talibanes en un operativo entre el domingo y el lunes en el sur del país, e informaron sobre la muerte de una mujer y un niño por un ataque de rebeldes en la ciudad oriental de Khost.
Por otra parte, un soldado británico de origen iraní comenzó a ser juzgado en Londres por haber espiado a favor de Irán durante su estancia como intérprete en Afganistán.
En Pakistán, las fuerzas de seguridad dijeron haber matado a 25 presuntos militantes de Al Qaeda en la convulsa región tribal de Bajaur.