■ Fuerte crítico del gobierno de Bush, elogia los esfuerzos mundiales para sofocar la crisis
Recesión prolongada, prevé el Nobel de Economía 2008, Paul Krugman
Ampliar la imagen Paul Krugman, profesor de economía y relaciones internacionales de la Universidad de Princeton, es aplaudido por la rectora de esa institución, Shirley M. Tilghman, tras el anuncio de la premiación Foto: Ap
Estocolmo, 13 de octubre. El ganador del Nobel de Economía 2008, el estadunidense Paul Krugman, declaró que la economía mundial podría sufrir una recesión prolongada, pero que escaparía del colapso. “Esto es aterrador”, afirmó Krugman tras enterarse que había ganado el Nobel, en referencia a la crisis de los mercados.
Krugman, un fuerte crítico del gobierno del presidente George W. Bush, elogió los esfuerzos de los líderes mundiales para sofocar la crisis. “Vamos a sufrir una recesión y tal vez prolongada, pero quizá no un colapso”, insistió Krugman, quien ganó el premio Nobel de Economía por sus investigaciones que ayudaron a esclarecer por qué algunos países dominan el comercio internacional.
Economista prominente que escribe columnas para el New York Times, Krugman, era desde hacía mucho tiempo un favorito para ganar el Nobel. Profesor de economía y relaciones internacionales en la universidad de Princeton, contó que la noticia lo tomó por sorpresa.
Krugman presentó por primera vez su modelo a los 25 años en 1979, arrojando luz sobre las consecuencias del librecambio y el flujo de población y recursos del campo a las ciudades, señaló Peter Englund, miembro de la Academia. Sus ideas, que además incorporan los costos del transporte en la teoría comercial, son utilizadas entre otras en los análisis de la Organización Mundial de Comercio, indicó.
“Corrí a darme una ducha para poder participar de la conferencia de prensa. Llamé a mi esposa y a mis familiares. Aún no he logrado tomar una taza de café”, confió en una conferencia telefónica. Pero la falta de cafeína no impidió que diera un diagnóstico sobre la actual crisis. “Estamos siendo testigos de una crisis que es tan severa como la que golpeó a Asia en los 90. Esta crisis guarda algunas similitudes con la Gran Depresión”, consideró.
No obstante, elogió los esfuerzos de los gobiernos para contener la crisis al decir que estaba “un poco menos aterrorizado hoy que lo que estaba el viernes”.