■ Exigen pobladores al edil hacer valer la autonomía municipal
No permitiremos la entrada del Ejército, advierte el FPDT
■ La incursión de militares, contra el crimen organizado: comandante
Ampliar la imagen Encuentro de integrantes de FPDT y habitantes de San Salvador Atenco con el edil perredista Saúl Nopaltitla, tras la entrada del Ejército el viernes pasaddo a ese municipio Foto: René Ramón
San Salvador Atenco, Mex., 11 de octubre. Moradores de las comunidades de Acuexcomac y Atenco e integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) advirtieron que no permitirán otra incursión del Ejército pues las heridas por los hechos violentos de mayo de 2006 “aún están abiertas”.
Tras la alarma causada por el patrullaje militar y los rondines de tropa efectuados la noche del viernes, los inconformes exigieron el sábado al alcalde perredista, Saúl Nopaltitla Sales, hacer valer la autonomía municipal, apercibiéndole que de lo contrario serán ellos quienes impidan a la milicia o cualquier otra fuerza ajena a la policía local ingresar a sus comunidades.
Trinidad Ramírez, dirigente del FPDT, aseguró que la presencia militar fue una provocación pues los uniformados recorrieron las calles 27 de Septiembre, Zapata, Florida e Hidalgo, para luego apostarse en la explanada municipal frente a la casa ejidal, donde campesinos mantienen un plantón desde 2006, tras los hechos en que más de 3 mil policías federales preventivos allanaron múltiples hogares.
En el lugar se concentraron unas 300 personas, entre vecinos de Acuexcomac y Atenco e integrantes del FPDT, que lanzaron cohetones de alerta y seguidamente fueron a la comandancia de seguridad pública municipal para exigir al comandante Mario Antonio Peña el retiro de los militares. “Se van o los sacamos”, advirtieron.
Peña se presentó ante los soldados y sugirió al mayor Rafael Mendoza trasladarse a la comunidad de Nexquipayac o apostarlos en la carretera federal. El oficial respondió que su objetivo era instalar un retén militar contra el crimen organizado en Atenco, asegurándole desconocer la animadversión de los moradores, pero accediendo a trasladarse al municipio de Papalotla, también ubicado en la región de Texcoco.
En entrevista, el sábado a mediodía, el alcalde Saúl Nopaltitla dijo que la inseguridad se vive en las comunidades de El Soldado, Santa Rosa, Granjas Arenal y Santa Isabel, no en los pueblos de Acuexcomac y Atenco, y se comprometió a solicitar que no los patrulle ninguna fuerza federal o estatal, pues “no es necesaria su presencia” y sí puede causar un enfrentamiento con los habitantes.