■ Hoy en Temixco se concretará un nuevo movimiento que liderará Alejandro Encinas

Nueva Izquierda y aliados enfilan hacia la mayoría en el Consejo Nacional perredista

Alma E. Muñoz y Fabiola Martínez

Nueva Izquierda y sus aliados se perfilaban anoche como mayoría en la designación de los 64 integrantes que faltaba elegir para concluir la integración del Consejo Nacional, órgano del Partido de la Revolución Democrática (PRD) que definirá la estrategia para el proceso electoral del año entrante y la designación de candidaturas, entre otras decisiones que regirán su futuro inmediato.

Al cierre de esta edición continuaba la votación de delegados del 11 congreso nacional del sol azteca, jornada a la cual tuvo que llegarse ante la falta de acuerdos entre corrientes, incluidas las del bloque de Izquierda Unida (IU), para integrar una planilla de unidad.

En el contexto de la reanudación de los trabajos del congreso tomó forma la iniciativa de Alejandro Encinas para liderar un nuevo movimiento dentro del partido, con los grupos internos que le apoyaron durante la elección de marzo pasado, y que hoy comenzará a perfilarse durante una reunión en Temixco, Morelos.

Participaciones separadas

No obstante este proyecto de unidad, el grupo del ex jefe de Gobierno del Distrito Federal se vio disminuido en la jornada electoral de este sábado, cuando Izquierda Democrática Nacional (IDN), Movimiento Cívico y corrientes locales de varias entidades del país, como estado de México, inconformes con la propuesta de integración de la planilla de IU, decidieron actuar cada uno por su lado.

El grupo de Dolores Padierna, IDN, participó con planilla propia, y los cívicos lo hicieron con el Movimiento por la Democracia.

La molestia también surgió al trascender que Encinas aceptó formar parte de la Comisión Política Nacional, ante el pregón de Nueva Izquierda de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) dará el triunfo a Jesús Ortega como presidente nacional perredista.

Rigoberto Ávila, secretario de Finanzas, confirmó la intención del ex funcionario de integrarse a la Comisión Política, hecho que también fue ratificado por Dolores Padierna, quien cuestionó a Encinas por desairar el acuerdo de encabezar una planilla de unidad y la propuesta para ser nombrado consejero emérito. “Él dijo que no, porque ya estaba en la Comisión Política, pero eso no tiene nada que ver, porque el consejo manda a la comisión y no al revés”, expresó.

–Parecería que admite su derrota ante Ortega, aun cuando el TEPJF no emite su fallo –se le comentó.

–Ésa es la otra parte, que significa romper el (acuerdo al cual habría accedido con Nueva Izquierda) de 60-40 (para la composición del consejo) o es romper acuerdos que vienen. Entonces, ¿qué acuerdos tienen? Más bien irse a secretario general, ¿ya lo resolvieron, ya está? No, no, no (le dijimos), no hablemos de eso. Concentrémonos en la lucha. Hay acuerdos que no conocemos y la verdad es que no nos gusta ese trato. Yo llevé (al equipo de Encinas) hasta los votos físicos (que tenemos). Llevaba 303, aunque estamos garantizando como 250-260, y no los quisieron.

En el transcurso del día se confirmó la intención de Encinas por encabezar un movimiento independiente a las corrientes de Nueva Izquierda y sus aliados, con una férrea oposición del partido a la privatización de Petróleos Mexicanos y la defensa de causas sociales.

“Insistimos en la necesidad de llegar a un acuerdo general para que el partido haga frente a la situación del país, sobre todo la defensa del petróleo que encabeza Andrés Manuel López Obrador y contra el autoritarismo gubernamental. Estamos trabajando en ese sentido y hace falta una postura unitaria”, señaló Rigoberto Ávila.

A pregunta expresa respecto de si se trataba de una nueva corriente, expresó: “nosotros no nos vamos divorciando de nadie. Encinas ha encabezado un movimiento que busca la solidez del PRD, en eso tenemos tiempo trabajando”. Más tarde se confirmó el encuentro, este domingo, en Temixco, adonde acudirán representantes de las corrientes Redyr (de José Antonio Rueda), Unyr, Foro Nuevo Sol, Izquierda Social, IDN y grupos estatales. Fue invitado el Movimiento por la Democracia pero Alfonso Ramírez Cuéllar rechazó asistir. Cívicos también declinó, luego de que Encinas dirigió la invitación personalizada a Humberto Zazueta.

Padierna subrayó que la separación de su corriente para fines de la lucha por lugares en el séptimo Consejo Nacional no significa ruptura con Izquierda Unida. Por el contrario, afirmó, consideramos que esta decisión abre la posibilidad de que el bloque logre más lugares en esa instancia interna, dijo.

Explicó que el desmarque coyuntural obedeció a la negativa de IDN por ceder a Encinas más lugares en la integración de la planilla para incluir en el consejo a personas de su equipo. “Quería darnos sólo dos cuando, por el número de votos que traemos, teníamos derecho a 14. Ya habíamos aceptado cederle tres lugares, Foro Nuevo Sol, Redyr e Izquierda Social uno cada uno, pero no respetaron el acuerdo y nosotros decidimos hacernos respetar”.

La reanudación del congreso nacional, con un costo aproximado de un millón de pesos (entre viáticos, transportación aérea o terrestre, comida y alojamiento de delegados, además de la renta de la Expo Morelos) estaba programada para las 11 de la mañana, pero la falta de acuerdos entre las expresiones, incluida la elección del secretario de Asuntos Juveniles, tuvo un retraso de ocho horas. La informalidad prevaleció cuando cerca de las 2 de la tarde los perredistas, ya con el acuerdo de someter a votación el nombramiento de los 64 consejeros y consultar entre los delegados si estaban de acuerdo en que la designación de 15 eméritos recaiga en el próximo Consejo Nacional, abrieron 11 urnas para elegir entre 10 planillas, hasta las 8 de la noche.

Cerca de las 11 de la noche, se proyectaba que Nueva Izquierda y sus aliados obtendrían 31 lugares, ADN 10, IDN 11; Izquierda Unida entre 9 y 10, y la planilla Movimiento por la Democracia y cívicos 2 o 3. Un lugar en el consejo supone 17 votos.

Por otra parte, en tanto reanudaban los trabajos del congreso, una comisión de perredistas emitió pronunciamientos, en nombre del partido, en repudio a la “represión” contra los integrantes de la sección 19 del sindicato magisterial, en Morelos, y exigió un plan de acción para hacer frente a la crisis económica mundial, particularmente para recuperar la autonomía alimentaria. Mientras, decenas de consejeros deambulaban por restaurantes y calles aledañas a Paseo de la Reforma, para matar el largo lapso de espera.

En ese ínterin, congresistas de Nueva Izquierda denunciaron que una mujer pretendía, a nombre de Dolores Padierna, comprar votos de delegados en 3 mil pesos. Se apoyaron en la denuncia de Araceli García Salayandia, de Campeche.