Feria del libro en el zócalo

■ Primera jornada de actividades artístico-culturales en el encuentro editorial de la capital

Música y títeres propiciaron una cita entre transeúntes y libros

■ La iniciativa del Gobierno del DF se suma al reto nacional de concretar el derecho a la cultura

■ Juan Bañuelos dará un recital de poesía y Mateo-Sagasta disertará sobre el Siglo de Oro español

Arturo Jiménez

Jazz, música renacentista, rock alternativo, títeres, codiciadas exposiciones de libros sobre el 68, ofertas editoriales y discursos de inauguración configuraron parte de la primera jornada de la octava Feria del Libro en el Zócalo de la Ciudad de México, la cual se suma al reto nacional de llevar a la realidad una de las ramas de las recientes reformas constitucionales sobre el derecho a la cultura: el derecho a la lectura.

Tras las palabras formales de apertura en el Foro Principal Víctor Hugo Rascón Banda, a cargo de la titular de la Secretaría de Cultura del gobierno capitalino, Elena Cepeda, acompañada de Paloma Sáiz, Juan Luis Arzoz, Paco Ignacio Taibo II y otros, la fiesta comenzó con el grupo de jazz contemporáneo Jack’s, que mantuvo llena esa carpa, en su mayoría con la gente que sorprendida se tropezó con ofertas de libros y una programación artística gratuita y de muy buen nivel.

Cepeda, en representación del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, dijo que la feria buscar propiciar el encuentro de los ciudadanos con los libros, en la línea de los derechos culturales, pues en México todavía son muy bajos los niveles de lectura, aunque en la capital del país han aumentado gracias a un programa de fomento que incluye libroclubes, tianguis de libros, distribución de títulos en el Metro, obsequio de miles de ejemplares y otros.

Y mientras Sáiz, directora de la feria, reiteró que mediante esta fiesta librera se pueden atraer más lectores, por su ubicación y las varias ofertas, Arzoz, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, recordó la paradoja planteada por el historiador Miguel León-Portilla de que somos un país de libros pero no de lectores.

Muy cerca del Foro Rascón Banda, y luego de pasar por un área donde se tuvo el tino de poner pequeñas bancas de madera, en el Café Literario Alejandro Aura se presentaba a un guitarrista clásico con el programa Historia en seis cuerdas, que convocaba a más de la mitad del sitio. Más tarde, intercalados con lecturas en voz alta, se presentarían el tanguista Carlos Daniel, la obra de teatro El médico a palos y el Dueto Skanda, entre otros.

Minilibros y granjeros

En uno de los locales, la gente se sorprendía con ¡los libros más pequeños del mundo!, con volúmenes de hasta 1.5 por un centímetro, como una colección de poemas. Y entre títulos descartables de chistes y trabalenguas, sobresalían ediciones encantadoras como una de El principito, con todo e ilustraciones, de unos seis por siete centímetros, con precio de 80 pesos cada una.

También llamaba la atención una colección de cinco tomos de Cuentos clásicos para niños, cada uno también a 80 pesos y todos a 400 pesos, con un mini soporte de madera gratis, aunque de ésta había una versión sin ilustraciones a 45 pesos cada tomo.

A unos metros, en el Foro Infantil Viaje al centro de las letras, lleno en su totalidad por niños y adultos, se presentaba la creativa obra La granja del granjero, en la que un actor y varios títeres y guiñoles, de la compañía Producciones Patito, daban cuenta de una obra sin diálogos, validos sólo de música, mímica y ruidos de perros, cerdos y vacas.

A la Expobiblos Gritos en el silencio 68.08, sobre el movimiento estudiantil, llegaron muchos jóvenes, aunque muchos se frustraron porque querían comprar las decenas de libros de ensayo, crónica y ficción sobre ese suceso histórico pero se les informaba que en su mayoría eran títulos agotados y que pertenecen a la Colección de la Preparatoria Popular Fresno Mártires de Tlatelolco.

Poesía y narrativa fantástica

“Hay una necesidad de los chavos por saber sobre el tema, y quisieran ver, hojear y tocar los libros (protegidos por acrílicos)”, comenta a La Jornada el escritor y promotor cultural H. Pascal, encargado del Foro Joven Rockdrigo González, donde tocaba el grupo de rock alternativo Tsmoto San Mi, de Chalco.

Más tarde estarían en ese foro grupos como el terceto neopunk Cabeza Parlante, se presentarían varios libros sobre el 68 y habría lecturas de poesía y narrativa fantástica.

La feria más popular, la que más libros vende y la que más personas convoca (el año pasado a cerca de un millón de visitantes, la mayoría que sólo pasaba por ahí), ha comenzado.

Y este sábado estarán figuras como Raphael Glucksman, con un libro sobre el 68; Juan Bañuelos, con un recital; Alfonso Mateo-Sagasta, en una charla con Eduardo Monteverde sobre el Siglo de Oro español, además de un amplísimo programa artístico para todos los gustos y edades.