■ Enfrentamos anarquía, opacidad y codicia, alerta Strauss-Kahn
El FMI da un giro y pide un estricto control de mercados e instituciones
París, 27 de septiembre. El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), el francés Dominique Strauss-Kahn, expresó que la crisis actual exige un control estricto de los mercados financieros, y dijo que el FMI es quien debe ponerlo en marcha.
En una entrevista que se publica hoy en el dominical francés Journal du Dimanche, Strauss-Khan aseguró que “por el momento apagamos el fuego”. Dos días antes, estimó en 1.3 billones de dólares el costo de la crisis financiera global, desde una estimación anterior de 1.1 billones.
“Es lo más inmediato y lo que hacen las autoridades estadunidenses. Pero después, deberemos sacar las consecuencias de lo que sucede: reglamentar las instituciones y los mercados financieros”.
El director del FMI reconoció una “ralentización seria y duradera del crecimiento económico mundial”, especialmente para algunos países pobres, “pero la economía real no se hunde. Las monedas no basculan. Los bancos centrales logran gestionar la crisis financiera”.
Sin embargo, dijo que para asegurar el futuro de la economía mundial “hace falta reformar”. El plan destinado a salvar el sistema financiero estadunidense es “bienvenido, pero debe ser el primer acto de una acción política internacional”.
“Los políticos inyectan dinero público para evitar que todo el edificio financiero se derrumbe, porque de eso depende la estabilidad de nuestras economías. Pero después hace falta reformar. Si no se impondrá la idea del pozo sin fondo, del Estado que socorre a directivos incompetentes y a especuladores codiciosos”, aseguró el responsable del FMI, para quien “el mercado no sana al mercado”.
Reivindicó el papel de reformador y controlador para la institución que dirige: “Actualmente nos enfrentamos a la anarquía financiera: la opacidad, la codicia, la irresponsabilidad de un sistema que se desarrolla sin relación con la economía real... Las finanzas deben ser controladas”.
“La cuestión de las remuneraciones no es marginal: controlemos las ganancias de los financieros y también las finanzas”, concluyó.
Protección a los pobres
Después de haber hecho su estimación sobre el costo de la crisis financiera, de 1.3 billones de dólares, Strauss-Kahn, exhortó a los gobiernos a tomar especialmente en cuenta a los pobres en las medidas dirigidas a atenuar el impacto de la inflación sobre sus poblaciones.
También expresó que el FMI prevé una inflación mundial de 13 por ciento a fines de 2008, opinó que es “un promedio y que “ahora todos sabemos que la inflación ejerce un impacto mayor sobre los pobres porque son los menos protegidos”.
El director del organismo añadió que para todos los gobiernos “siempre es más fácil anunciar medidas generales que puedan ser comprendidas por todos y puestas en práctica rápidamente. Pero sabemos que este procedimiento será menos eficaz que una medida que requiere más tiempo, que sea más fuerte desde el punto de vista político, pero que apunte a un objetivo más específico”, señaló.