■ Firman dos memorandos; Chávez, testigo
Millonaria inversión rusa en Venezuela en sector energético
Moscú, 26 de septiembre. Decenas de miles de millones de dólares se proponen invertir Gazprom, el monopolio estatal del gas, y cuatro grandes petroleras rusas en el sector energético de Venezuela, según los acuerdos que se dieron a conocer este viernes al término de la reunión que sostuvieron, en la ciudad de Oremburgo, región de los Urales, los presidentes Dimitri Medvediev y Hugo Chávez.
Los mandatarios fueron testigos de honor en la firma de dos memorandos, los cuales –en palabras del titular del Kremlin– “fortalecen nuestra cooperación y confirman la dinámica positiva de la relación bilateral”.
El presidente de Gazprom, Aleksei Miller, y el ministro de Energía y Petróleo de Venezuela, Rafael Ramírez –también director de Petróleos de Venezuela–, suscribieron un memorando de identificación de oportunidades de negocio entre Gazprom Latin-America y PDVSA Servicios.
El propio Ramírez firmó con su colega Serguei Shmatko, ministro de Energía de Rusia, un memorando de entendimiento para “proceder a elaborar un convenio complementario especial”.
Estos acuerdos, dijo Shmatko, suponen una inversión en Venezuela de capital ruso, estimada en “decenas de miles de millones de dólares”, a partir de la primavera boreal de 2009.
El compromiso sellado hoy es que, hacia el segundo trimestre del año siguiente, se constituya un consorcio ruso-venezolano que realizará inversiones millonarias para explotar sobre todo la faja del Orinoco, zona rica en petróleo y gas.
El consorcio –participarán por Rusia, Gazprom, como operador principal, y las petroleras LukOil, TNK-BP, Surgutneftegaz y Rosneft; y por Venezuela PDVSA y otras empresas– podría más adelante invertir en proyectos energéticos en Cuba y Bolivia, y en otras naciones del Cono Sur.
Durante esta visita de Chávez, la segunda desde julio pasado, se avanzó también en otras áreas de cooperación.
Sobre la mesa de negociación, para ultimar detalles, quedan nuevos contratos de compra de armamento ruso, acorde con la línea de crédito por mil millones de dólares que otorgó el Kremlin a Caracas; la idea de constituir una suerte de OPEP del gas; la posibilidad de implementar acciones conjuntas en materia de la utilización pacífica de la energía nuclear y la propuesta de Chávez de crear un banco para financiar los intercambios económicos y comerciales entre Rusia y Venezuela.
Todos estos proyectos dan relieve al carácter ascendente de la relación bilateral, que Medvediev y Chávez coincidieron hoy en calificar de estratégica, y alguno de ellos podría concretarse en acuerdos firmes para la visita del presidente de Rusia a Venezuela, que se rumora tendría lugar en noviembre próximo.
Mención aparte merece la creciente cooperación militar entre ambos países, que fue tema de conversación entre los mandatarios, de igual manera que en la cena de anoche entre Chávez y el primer ministro Vladimir Putin.
Las partes destacaron la reciente estancia durante varios días en una base militar de Venezuela de dos bombarderos supersónicos rusos TU-160, que efectuaron vuelos de reconocimiento sobre aguas neutrales muy cerca del territorio de Estados Unidos.
“Aunque por el norte (en alusión a Estados Unidos), dicen que son aviones viejos, quedamos maravillados con la tecnología de los TU-160”, comentó Chávez.
Pero sobre todo expresaron su satisfacción por las maniobras navales conjuntas, inéditas en el Caribe venezolano, que se prevé efectuar entre el 10 y el 14 de noviembre próximos. Para intervenir en las mismas, zarpó ya una escuadra de buques de guerra rusos, con el acorazado nuclear Pedro el Grande al frente.
Antes de que Chávez continuara esta noche la gira que lo llevará a Francia y luego a Portugal, Medvediev invitó a su colega venezolano al polígono de Donguz, cerca de la frontera con Kazajstán, donde hoy se realizó el lanzamiento de dos misiles tácticos Tochka-V, los cuales minuto y medio después de ser disparados destruyeron los puntos de mando del “enemigo imaginario” a 30 kilómetros de distancia.