En 2006, todos los partidos fueron desleales: Merino
El ex consejero electoral Mauricio Merino consideró que los partidos políticos “fueron desleales” en las elecciones presidenciales de 2006, por lo que todas esas conductas –dijo– deben ser sancionadas por el Instituto Federal Electoral, como esta instancia pretende hacerlo el próximo lunes en contra del PRD, el FAP y el PAN.
Entrevistado luego de su participación en la quinta Semana Nacional de la Transparencia, el investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) evitó pronunciarse en torno al monto de las multas, “porque no conozco a detalle el dictamen”, pero sostuvo que es partidario “de que el IFE haga su labor de autoridad, no sólo de gestor de la organización electoral. Esto quiere decir que cuando alguno de los partidos infringe alguna norma, yo veo con simpatía que la autoridad asuma su papel”.
El instituto, explicó, “está sobreactuando, si así lo ves, pero conviene a la ley”, para evitar que se repita lo que ocurrió en el pasado proceso electoral federal, donde “el IFE no se ciñó a sus atribuciones y nos metió en muchos problemas.
“Una autoridad está ahí para cumplir la ley y para hacer que la ley se cumpla, y esta es una autoridad que los partidos se dieron a sí mismos. Ellos definieron la ley y decidieron quiénes iban a ser las personas que estuvieran en este Consejo General. Entonces, creo que ellos deben ser los primeros en respetar ambas decisiones: la ley que nos dieron y las autoridades encargadas de aplicarla”, manifestó.
Omisiones y triunfalismos
En el IFE existe un dictamen –que podría ser aprobado este lunes– que agrupa las sanciones por el conjunto de acciones que emprendió la coalición Por el Bien de Todos después del 2 de julio de 2006, donde se contempla una multa por 63.5 millones de pesos para el PRD. En cuanto al PAN, le corresponderían 38 millones por injerencia del entonces presidente Vicente Fox en la contienda.
Al respecto, Merino Huerta consideró que con la pretensión del IFE de aprobar las multas no se corre el riesgo de que en elecciones federales subsecuentes se repita lo ocurrido en 2006.
“La experiencia nos muestra exactamente lo contrario –no estoy diciendo que el pasado se repita inexorablemente—: nos dice que no cumplir, omitir, no llegar a tiempo, no ejercer las facultades, fue lo que en buena medida produjo el conflicto que vivimos”, indicó.
Añadió que el IFE debe dejar en claro si va o no a sancionar al PAN y el PRD respecto de todas las faltas, como las cometidas el mismo día de la elección presidencial, cuando Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador “se declararon a sí mismos vencedores de la contienda, cosa que, en mi opinión, está prohibida por la legislación electoral”.