■ Me dicen que me comporte o me expulsan, acusó el técnico

Ferretti advierte una campaña de los árbitros en su contra

■ No descarta convertirse en silbante; sería como Marco Rodríguez, expuso

Agencias

El técnico de Pumas, Ricardo Ferretti, criticó el arbitraje que se realiza en México, porque se preocupa más en lo que pasa en las bancas que en la cancha, y consideró que podría existir una campaña en su contra. “Van dos o tres veces que antes de empezar el partido me advierten que me comporte o me expulsan”, aseguró.

Añadió que la regla de estar sobre los entrenadores y echarlos del partido “es benéfica” para la Federación Mexicana de Futbol (FMF), porque con las dos expulsiones que suma en el torneo “debo 42 mil pesos y les voy llenando su arquita poco a poco, espero que no, pero ya llevo una buena participación”.

En tono irónico, señaló que tendrá que pedir otra vez un préstamo para solventar la multa. “Ya tengo dos, esta será la tercera. Voy a terminar por pagar en 10 años... bueno, a ver si me alcanza”, agregó.

El Tuca aclaró que, contrario a lo que sucede en México, en el partido del martes de la Liga de Campeones de Concacaf, contra San Francisco en Panamá, ni el silbante ni el cuarto oficial le llamaron la atención por estar en el área técnica.

“Si uno se para un minuto y no le dice nada al árbitro, a los rivales, uno trata de ser consciente porque hay una comunicación de la FIFA, entre comillas, porque parece que sólo es para la FMF. Creo que la Concacaf todavía no la sabe. Hay que decirle para que pueda hacer lo mismo que aquí”.

De buen humor, indicó que como Raúl Arias, técnico de San Luis, su rival de este domingo, también fue expulsado en la jornada previa, “invitaré a mi compadre al palomar a ver el partido”.

Aseguró que esta “batalla” aún no ha sido ganada en definitiva por los silbantes. “Ellos han dado pasos, pero vamos a ver si nos emparejamos”.

Ferretti señaló que después de muchos años, “creo que es un poco difícil cambiar, pero pienso que tengo que ajustarme. Naturalmente uno no tiene agua en las venas y ciertas decisiones muchas veces parecen tendenciosas.

“Siempre tomé la política de no hablar ni cuando ganaba ni cuando perdía, pero hoy me veo en la necesidad de expresar mi opinión”.

Sobre si en un futuro se convertiría en árbitro, comentó que sí y que “sería como Marco” (Antonio Rodríguez), a quien destacó por ser de los pocos que se apega al reglamento.

Por su parte, el argentino Martín Bravo confía en debutar este domingo en el futbol mexicano, aunque fue expulsado ante San Francisco.